El Presupuesto General de la Nación para 2020, presentado el 30 de septiembre pasado por el Ministerio de Hacienda, está más que verde para tener el aval de los diputados de la Comisión de Hacienda y puedan emitir un dictamen favorable.
Cabe recordar que el presupuesto de este año, fue aprobado por el pleno en diciembre de 2018, lo que hace prever que podría, en el mejor de los casos ocurrir lo mismo o en otro escenario ser aprobado el próximo año.
El diputado Donato Vaquerano, de Alianza Republicana Nacionalista (ARENA) y Juan José Martel de Cambio Democrático (CD), coinciden en que se ha avanzado en materia de transparentar la presentación del presupuesto y de ir definiendo prioridades pero todavía hay un enorme vacío en la distribución porque no solo es de repartir el dinero.
Vaquerano advirtió que “no podemos seguir recibiendo informes de labores de funcionarios cuando llegan con libritos bonitos a decir cómo se gastaron el dinero, a nosotros nos interesa la influencia de un programa en mejorar la calidad de vida de los salvadoreños”.
Por eso, es necesario elaborar presupuesto con resultados; cada ministerio debe elaborar programas que deben tener una meta y crear indicadores para dar medición continua para estos programas.
Mientras, el diputado Martel indicó que “estamos hablando de un presupuesto de los cuales $5 mil 670.3 millones son ingresos del Estado lo que significa que el presupuesto tiene un desfinanciamiento de $755.8 millones”.
Hay que tomar en cuenta áreas prioritarias del presupuesto, debe ser un instrumento para desarrollo y el crecimiento de la economía, el beneficio social y tiene que garantizar el funcionamiento de la seguridad y el de las instituciones que muchas están deficitarias, recalcó el legislador del CD.
Insistió en que se necesitan presupuestos plurianuales porque hay que trabajar en proyectos de mediano y largo plazo.
“La propuesta es que comencemos a hacer una reunión aparte de la Comisión de Hacienda, para hacer una reunión extra para ver dudas y recoger opiniones de las instituciones que vamos a citar”, dijo por su parte Vaquerano.
Qué hay con la elección del procurador o procuradora de Derechos Humanos
La Elección del titular de la Procuraduría para la Defensa de los Derechos Humanos (PDDH), sigue siendo una deuda pendiente de los políticos.
El nuevo funcionario tendría que haber asumido el cargo el pasado 22 de septiembre, pero la falta de entendimientos entre ARENA y el FMLN han obstaculizado el proceso.
Martel fue claro al expresar su preocupación. “Tengo preocupaciones, en primer lugar, se ha vuelto endémico que no se eligen funcionarios en tiempo; pasan días o meses y esto causa un daño a la constitucionalidad del país y en segundo lugar, la forma de elegir”,
Afirmó que se han suspendido en varias ocasiones las reuniones de la Comisión Política, lo que ha impedido que se discuta la elección del Procurador de Derechos Humanos,
Incluso reveló que tuvo conocimiento que se estaba construyendo un consenso (para elección del Procurador) que no se estaba generando en el seno de la Comisión Política.
El arenero Vaquerano mientras tanto, opina que hay que reconocer el avance que han desarrollado en materia de elecciones de funcionarios de segundo grado, un avance en transparentar los procesos y tener la participación activa de los diputados.
Informó que “el miércoles nos reunimos con algunos aspirantes para aclarar dudas para ver cuál es la visión que tienen para estar al frente de la ¨DDH”.
“Estamos evaluando las últimas oportunidades para hacer una elección del Procurador de Derechos Humanos”, enfatizó,
Admitió que si bien es cierto que no deberían de atrasar, tienen un compromiso para continuar con la línea de mejorar los estándares con los que se debe elegir al funcionario.
“Para mí lo importante es que el debate sea transparente, que se haga sobre la mesa, lo que no me parece es que anuncien posibles consensos cuando los organismos no se han reunido”, expresó Martel.
Para Vaquerano, “no se vale señalar y hacer juicios a priori tratando de destruir la opinión de los demás, hay una cantidad enorme de opiniones de cómo debería ser el procurador, nosotros lo estamos revisando”.
“Hay 2 fuerzas políticas que tienen el control de la Asamblea Legislativa (ARENA y FMLN) y ha generado una especie de equilibrio, el punto es cómo crear la dinámica de que lo numérico es lo que pese”, puntualizó Martel.
José Apolonio Tobar, es el que se mantiene entre los favoritos de la mayoría de grupos parlamentarios. Es juez propietario del Juzgado de lo Civil en San Vicente.
Pero, tiene cuatro expedientes de investigación en la Fiscalía General de la República (FGR). Uno por falsedad ideológica y prevaricato; otro por tráfico de influencias; un tercero por prevaricato y actos arbitrarios y un último que es un juicio civil en la Corte de Cuentas de la República (CCR).
Por si fuera poco, en el Ministerio de Hacienda presentó un formulario en 2016 que daba cuenta que había donado $192.32 al FMLN, entonces partido en el Gobierno; y en todo ese año donó $1,730.88 al mismo instituto político.