domingo, 12 mayo 2024

Nuevas Ideas y su Ideologí­a

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Esta es la historia de una acción ciudadana, convertida en movimiento polí­tico y que luego fue partido de gobierno. Si en tres dí­as Nuevas Ideas logró reunir 200,000 firmas definir su ideario es simple: es un partido con ideologí­a ciudadana.

¿Y qué debemos entender como un partido de ideologí­a ciudadana?

Es un partido que parte no de la derecha o izquierda (modelo representado en ARENA/FMLN y sus satélites y que se ha agotado ya en nuestro paí­s); Nuevas Ideas al ser integrado por un conglomerado tan diverso social y culturalmente parte de la centralidad (que no es el centro) polí­tica.

Al no ser un partido polarizado menos podrí­a ser polarizante de cara a la sociedad porque sus mismas estructuras (que imagino ya nadie duda existen) no se lo permitirí­an.

No es, tampoco, un partido de Nayib Bukele como mal intencionadamente lo han pretendido hacer parecer. Es más sencillo: Bukele lejos de ser mesí­as, es el instrumento-lí­der con el que Nuevas Ideas romperá el bipartidismo.

Cabe decir que la estridencia y omisiones desde LPG, EDH, la derecha y el FMLN más rancio y hembrista lo convirtieron en un artefacto oportuno para derrotar a los dos grandes partidos que dejaron una vez en el gobierno de lado su perfil ideológico -usándolo solo como accesorio electoral- para pelearse un mismo electorado.

Por eso entre más ataquen o traten de inhabilitar a ese mecanismo más indignación provocaran en el pueblo (en su mayorí­a joven) que desea comenzar a tomar sus propias decisiones, sin complejos y avanzar incluso, equivocándose:

Los principios de Nuevas Ideas si decimos parten la centralidad polí­tica es porque este partido buscará la perfección de la sociedad civil no desde el Estado sino desde ella misma (ideologí­a ciudadana) y esto pasa por hacer algo que ARENA/FMLN en 30 años no lograron: el reconocimiento y valoración de las diferencias y pluralidad de El Salvador actual, no del paí­s de antes, y durante la guerra civil (despolarización de los temas de nación).

La doctrina que deberá inspirar este cambio y regirá desde su discurso pasando por su práctica y metodologí­a polí­tica y electoral es la incorporación a sus principios del artí­culo 1 de nuestra Constitución: respeto y defensa de la dignidad de la persona humana.

Des ideologizar el debate sobre temas nacionales no significará que no se reconozcan los respetos a la vida, de la familia y al medio ambiente. Pero la revolución tecnológica ha establecido que ya no hay una única verdad sino verdades intergeneracionales y, todas son válidas.  

Y el ideario que determinará el debate sobre los conceptos vida, familia, medio ambiente es la primací­a del interés general sobre el particular o de grupos. La máxima libertad personal compatible con los derechos de los demás.

Nuevas Ideas se hacen abanderados de la protección al Estado Constitucional de Derecho (principio de legalidad para todos y Tribunal Constitucional independiente de influencia polí­tica, empresarial y teológica-ideológica para controlarlo) y Defensa de la Justicia Social, aspirando a llegar a un Estado Social de Derecho que comience a reparar la deuda social histórica salvadoreña, llena de agravios y despojo desde nuestros pueblos originarios hasta el negado mestizaje indio-africano del cual el actual 85% de la población es resultado.

Ideas como incorporar las consecuencias ambientales a las decisiones polí­ticas y desarrollo humano sustentable es una novedad y reconocimiento ideológico de la crisis ambiental que vive nuestro paí­s. Y esto está vinculado entonces a uno de los más sentidos y estructurales problemas salvadoreños: trabajo (no empleo) decente. Su búsqueda. 

Manejo transparente y eficiente de los recursos públicos es uno de los principios más decentes y que las acciones de los dos partidos mayoritarios hasta ahora han obviado defendiendo cada quien a su corrupto y atacando al corrupto del otro. Los salvadoreños demandan que todos los ladrones vayan a la cárcel.

Respeto a los principios del humanismo. Un buen detalle de esto, que puede entenderse como algo abstracto, está muy bien desarrollado en la Declaración Universal de los Derechos Humanos.

Nuevas Ideas cree que la solución pacifica de los conflictos (la violencia social y civil de la que somos ví­ctimas y victimarios) entre individuos, grupos o naciones es vital para el entorno natural del que somos parte todos y por ello estamos obligados a generar un entorno compatible con la vida.   

Esto lleva a que Nuevas Ideas sea incompatible con la violencia y grupos al margen de la ley y funcionarios o ciudadanos corruptos.

La ética humaní­stica propone la solución individual y social desde la razón, el esfuerzo inteligente, pensamiento crí­tico, empatí­a y compasión con los seres vivos.   

Finalmente Nuevas Ideas se suma a la vieja idea de Francisco Morazán, Gerardo Barrios y Augusto César Sandino: la patria grande, la unión centroamericana.

Corolario:

¿Chiflón o nano-polí­tica? Ambas. Lleguemos a una conclusión después de analizar el todo: si bien ARENA nos dice es un cuadrilátero, también podemos decir que el FMLN habí­a sostenido que es un rectángulo. Al parecer son distintos. Pero ambos han gobernado 30 años y, desde el poder hemos notado que ambas fuerzas polí­ticas son una figura igual, con cuatro lados.

¿Qué es entonces Nuevas Ideas? Es un partido que tiene que jugar dentro de las reglas del sistema construido por ARENA/FMLN y eso lo obliga más no asume cosas que la vetusta norma polí­tica exige, como por ejemplo: que ante la resistencia a legalizar desde el bipartidismo la candidatura presidencial no partidaria obliguen a Nayib Bukele a afiliarse a un partido polí­tico que tenga las legalidades para competir en 2019 y formar una coalición que incluya a Nuevas Ideas, partido que pesar de reunir más de 200,000 firmas quedará impedido de postular candidato propio (pero si en coalición) por un sistema polí­tico que se encuentra en los estertores finales.

El diamante y el carbón están hechos de las mismas moléculas. Pero su composición interna es la que hace que el primero sea resistente e irrompible y el segundo se quiebre fácilmente.

Así­ explicarí­a por ahora la diferencia entre Nuevas Ideas y el FMLN/ARENA, su reto es mantenerse siempre de esa manera. A través del esfuerzo, el triunfo.   

Si vemos tres perros negros (cadejo), concluimos que todos los perros son negros.   

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Marvin Aguilar
Marvin Aguilar
Analista político, historiador, colaborador y columnista de ContraPunto
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