Un grupo de salvadoreños emprendieron un viaje hacia Estados Unidos y cruzó el punto fronterizo de La Hachadura, que conecta a El Salvador con Guatemala, informó una portavoz de la Dirección General de Migración y Extranjería (DGME).
Estas personas, que pretenden sumarse a la caravana de hondureños que partió la semana pasada se concentraron desde la madrugada en la Plaza al Divino Salvador del Mundo, en San Salvador.
La fuente de la DGME indicó que solamente 45 personas, todas mayores de edad, cruzaron la frontera La Hachadura, ya que al resto, 15, se les negó la salida por “no portar documentos válidos de viaje”.
Señaló que en el grupo de 15 salvadoreños que no continuaron con su camino se identificaron 10 menores de edad.
Sin embargo, fuentes oficiales de Guatemala informaron este martes que 102 personas ingresaron en caravana a Guatemala.
Trasciende que 75 salvadoreños están en el paso fronterizo para ingresar a México de forma legal.
En tanto, la Casa del Migrante informó que hace falta alimentos para seguir con la ayuda a los grupos de centroamericanos.
Autoridades de seguridad supuestamente detuvieron a uno de los organizadores de la caravana, sin que hasta el momento se haya confirmado o desmentido dicha información.
Los medios también informaron que un grupo de 10 personas desistió de viajar de manera irregular a Estados Unidos y fueron devueltos a sus hogares en transporte estatal.
Esta es la primera caravana que sale del país en 2020 y durante la Administración de Nayib Bukele, quien se ha comprometido con frenar la migración irregular y ha estrechado lazos con Estados Unidos.
En enero de 2019, más de 140 salvadoreños en caravana cruzaron el punto fronterizo de La Hachadura siguiendo los procedimientos legales.
Ayer la tensión e incertidumbre marcaron la entrada a la fuerza de la caravana migrante al sur de México, donde cientos de centroamericanos cruzaron el Río Suchiate pese a la presencia de la Guardia Nacional mexicana y tras un fallido diálogo con el Instituto Nacional de Migración (INM).
Elementos de las fuerzas mexicanas de seguridad se colocaron a lo largo del río, en el suroriental estado de Chiapas, para contener a gran parte de los 5 mil migrantes de Honduras, Guatemala, El Salvador y Nicaragua, a quienes incluso golpearon y rociaron gas lacrimógeno para evitar su ingreso irregular al país.
Las autoridades mexicanas esperaban la llegada de los migrantes desde el domingo, pero los integrantes de la caravana decidieron postergar su entrada a México para duplicar su tamaño original, previsto en 2 mil500, y alcanzar hasta 5 mil integrantes, según estimaciones.
En septiembre del año pasado, el Gobierno salvadoreño a través del Ministerio de Justicia y Seguridad, creo las patrullas fronterizas para evitar el flujo hacia Guatemala y Honduras, informó el equipo de comunicación de esa entidad.
Los operativos comenzaron días después en La Hachadura, uno de los principales pasos fronterizos entre Guatemala y El Salvador.
El operativo incluyó más de 800 agentes. El plan de control territorial es parte de las estrategias de seguridad, dijo en esa ocasión el ministro de seguridad Rogelio Rivas.