Las organización que conforman el colectivo Movimiento de Victimas, Afectados y Afectadas por el Cambio Climático y Corporaciones (MOVIAC) aseguraron que se debe regular la cantidad de antenas instaladas en El Salvador, ya que aseguran que esto podría tener efectos adversos en la salud de la población, principalmente en menores de entre cero y seis años.
Los activistas dicen que la cantidad radiaciones no ionizantes (como las señales telefónicas inalámbricas y las redes de Wi-Fi) son la causa principal de daños a la salud en otras regiones como Europa, y por lo tanto que es necesario que el Ministerio de Salud (MINSAL) con otras instancias gubernamentales preste atención al tema de la instalación desmedida de antenas, principalmente en la capital del país.
“Pedimos al Estado que regule las instalaciones de antenas. No estamos pidiendo que se prohíba“, expresó el presidente de CESTA, Ricardo Navarro.
De igual modo, el representante del Comité Jaguares Defensores de la Madre Tierra, Modesto Rivas, hizo hincapié en prestar atención a las radiaciones que emiten las antenas telefónicas.
“No solo el Ministerio de Salud tiene que estar atento a la regulación de las antenas telefónicas y de Wi-Fi, sino también la SIGET ( Superintendencia General de Electricidad y Telecomunicaciones) debe hacer un seguimiento para medir la radiaciones“, dijo el activista.
Investigaciones de la Agencia Europea de Medio Ambiente (AEMA) aseguran que existe un riesgo para la salud al exponerse a campos electromagnéticos como las redes Wi-Fi en extensiones territoriales muy reducidas y con grandes cantidades de antenas.