Las empresas de transporte terrestre de pasajeros entre Nicaragua y Costa Rica están paralizadas desde el lunes, luego de que el Consejo de Transporte Público costarricense estableciera nuevas medidas de restricción vehicular que no permiten la circulación en las rutas internacionales autorizadas.
Enrique Quiñónez, propietario de la empresa de transporte Nicabus, dijo que la medida fue comunicada a todas las empresas que prestan servicios de transporte internacional.
“Hasta el miércoles de semana Santa logramos operar trasladando personas, principalmente nicaragüenses de Costa Rica a Nicaragua. Sin embargo, el sábado recibimos una comunicación del Consejo de Transporte Público de Costa Rica donde se le pide a las empresas de transporte internacional suspender todo viaje desde el 13 hasta el 30 de abril. Ya Costa Rica cortó todo tipo de transporte internacional entre ambos países”, explicó.
El sector del transporte ya sufría pérdidas por el cierre de otras fronteras en la región producto de las medidas de prevención de los estados ante la pandemia del COVID-19, como las de Guatemala, El Salvador y Honduras, indicó el empresario.
En tanto, el transporte de carga que es utilizado para la importación y exportación de productos está trabajando un 50 % de su capacidad, según informó el presidente de la Federación de Transporte de Carga de Nicaragua, Marvin Altamirano.
“Habíamos primero tenido la crisis política donde las empresas llegaron al 40% de trabajo, empezamos a trabajar el 2019, nos logramos recuperar un 70%, y otra vez que se da esta crisis, pues ahorita estamos otra vez en el 50% del transporte de carga a nivel nacional e internacional”, explicó Altamirano.
Los empleados esperan por clientes en un popular mercado de Managua, Nicaragua, el 7 de abril de 2020. Los restaurantes estuvieron vacíos, con poco tráfico en las calles y menos turistas en las playas.
Los transportistas pesados además se quejan de las medidas en países como El Salvador, Guatemala y Panamá, entre ellas, mantenerse detenidos durante el toque de queda o hacer largos trayectos en tan solo 72 horas.
El presidente de la gremial dijo que los conductores están exponiendo su salud para mantener con cierta regularidad las importaciones y las exportaciones en la región, por lo que pidió a los gobiernos apoyar el trabajo que realizan los conductores, que ahora son los únicos circulando en las fronteras.
“Nosotros como sector ponemos en riesgo nuestras vidas, porque los conductores andan circulando por todos estos países, y pueden ser contagiados, y uno mira contradictorio que los países que no están trabajando normal te estén restringiendo un tiempo para entrar y salir”, apuntó Altamirano.