La Unidad Ecológica Salvadoreña (UNES) denunció este jueves la tala desmedida de al menos cinco manzanas de bosque en el cerro El Águila, ubicado en Juayúa, Sonsonate.
De acuerdo con la entidad ambiental, la tala masiva ha arrasado con árboles de hasta metro y medio de diámetro, los cuales conformaban un “verdaderos corredor biológico” en la zona, poniendo en riesgo a unas 27 especies de mamíferos y 71 de aves, algunas de ellas en peligro de extinción como el búho fulvo y el águila crestada negra.
“La región del país donde se ha desarrollado esta barbarie ambiental forma parte de la cordillera Apaneca-Illamatepec, un área del país donde se ubica una de las mayores reservas de agua, donde se dan las lluvias más importantes del país en cuanto a cantidad”, indicaron los miembros de UNES mientras exigieron a la ministra del medio ambiente, Lina Pohl, que realice una investigación profunda del caso, para determinar si el hecho afectó a un área natural protegida.
Sin embargo, las autoridades del Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales (MARN) argumentaron previamente que la tala se realizó en un terreno privado, el cual contaba con la autorización del Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG).
Ante ello, los miembros de la UNES exigieron al MARN un plan para recupera la zona intervenida y que los responsables sean sancionados con varios salarios mínimos de multa por cada árbol talado.
“No podemos permitir que los privados y los que hacen negocios con la naturaleza sigamos dándole luz verde para que sigan agudizando la crisis ambiental que tenemos. Será necesario además un plan que contemple las medidas a promoverse con el fin de recuperar y proteger a corto, mediano y largo plazo la zona intervenida”, añadieron los miembros de UNES y dejaron claro que estarán alertas a los informes del MAG y del MARN, o de lo contrario llevarán el caso ante la Fiscalía General de la República, pues consideran que en la región se cometió el ilícito de destrucción de bosques.