Joseph Eugene Stiglitz es un economista y profesor estadounidense. Recibió la Medalla John Bates Clark y fue laureado con el Premio Nobel. Columnista de ContraPunto.
Es poco probable que el acuerdo global emblemático que forjó Estados Unidos avance si el propio Estados Unidos no cumple con sus condiciones, dijo el científico
La experiencia de los años setenta ofrece algunas enseñanzas importantes para el momento actual. Una es que grandes aumentos de los tipos de interés pueden ser muy disruptivos.
Estados Unidos no quiere que lo destronen. Pero que China lo supere en lo económico es sencillamente inevitable, cualquiera sea el indicador oficial que se use.
El problema no es sólo la globalización. Toda nuestra economía de mercado ha dado pruebas de falta de resiliencia. Esencialmente fabricamos autos sin ruedas de auxilio –reduciendo unos pocos dólares del precio, sin preocuparnos demasiado por las exigencias futuras-.
Los países pequeños sin monedas subvaluadas ni generan externalidades negativas ni adoptan políticas en beneficio propio a costa de los demás. En consecuencia, cuando implementan controles de capital, por lo general es en circunstancias que poco tienen que ver con la competencia del FMI
Cuando los países sufren un dolor tan agudo, se tiende a culpar a los funcionarios más de lo que merecen. Muchas veces, el resultado es una política más conflictiva que complica aún más la resolución de los problemas reales
Al parecer, el que paga manda. Afortunadamente, el periodismo de investigación ha descubierto un comportamiento mucho peor, inclusive un intento sin ambages por parte de Malpass por cambiar la metodología de Facilidad para Hacer Negocios para bajar a China en los rankings
Pero una parte esencial de la respuesta tiene que ver con un enorme malentendido (presente sobre todo en la derecha) en relación con la libertad individual.
La crisis climática exige enormes cambios económicos y sociales. No tenemos otra opción más que cambiar la manera en que consumimos, producimos e invertimos
Deberíamos reconocer el actual “debate sobre inflación” por lo que es: una falacia que está siendo planteada por quienes obstruirían los esfuerzos de la administración Biden por abordar algunos de los problemas más fundamentales de Estados Unidos