Apple impulso este jueves a Wall Street, que terminó la jornada con subidas, ayudada también por los datos de inflación y las conversaciones comerciales entre EE.UU. y China.
Tras dejarse ayer un 1.24 % después de presentar nuevos iPhone, las acciones de la empresa de la manzana rebotaron con una subida del 2.42 %.
Si los nuevos teléfonos no cautivaron a los inversores, la solidez del negocio de la californiana fue suficiente para que hoy sus acciones remontasen con facilidad.
Apple, la compañía con mayor capitalización en la Bolsa de Nueva York, lideró los avances entre los 30 valores que componen el Dow Jones, el principal indicador de Wall Street.
En lo que va de año, las acciones de la compañía han ganado alrededor de un 28 % en Nueva York.
Junto a la firma que dirige Tim Cook, otras empresas del sector tecnológico tuvieron hoy ganancias significativas, caso de IBM (1.62 %), Microsoft (1.07 %) o Alphabet (0.90 %), en un mes que no está siendo especialmente bueno para ellas.
En general, los inversores se mostraron hoy tranquilizados por los últimos datos de inflación en EE.UU., que alejan los miedos de que pueda llegarse a una inflación desbocada.
Según las autoridades estadounidenses, los precios siguieron subiendo en agosto, un 0.2 %, pero el ritmo se ralentizó, colocado el índice de precios al consumo (IPC) interanual en el 2.7 %, frente al 2.9 % del mes precedente.
Para los analistas, esos números y otras señales recientes muestran que la economía del país no corre por ahora riesgo de un sobrecalentamiento y que, por ahora, nada obliga a la Reserva Federal (Fed) a cambiar sus planes.
En el ámbito comercial, los operadores siguieron hoy pendientes de la relación EE.UU.-China, después de que en la víspera se conociesen posibles nuevas conversaciones entre las dos potencias.
Esas expectativas alimentaron los primeros compases de la sesión de este jueves, pero se frenaron parcialmente con un tuit del presidente estadounidense, Donald Trump, insistiendo en que su país no tiene ninguna prisa en volver a la mesa de diálogo.
La relación de estira y encoge entre Washington y Pekín ha hecho sufrir numerosos altibajos a los mercados en lo que va de año y, por ahora, hace que se mantenga la incertidumbre.
"Los inversores están francamente confusos", admitía hoy a The Wall Street Journal Jennifer Ellison, de la firma BOS, que se aseguraba mantenerse a la expectativa de alguna "respuesta clara" en materia comercial.