Un sargento de la Fuerza Armada (FAES) fue detenido este martes en el departamento de San Vicente por colaborar y vender un fusil AK-47 a miembros de la Mara Salvatrucha (MS-13), informó la Fiscalía General de la República (FGR).
El sargento, Adán Alfaro Iraheta, de 46 años de edad, estaba destacado en la Quinta Brigada de Infantería de la FAES y es acusado de vender el arma y 500 cartuchos para la misma a una clica que operaba en el cantón Calderas, municipio de Apastepeque del departamento referido.
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“Al sargento se le incautó una pistola nueve milímetros y un cargador con 11 cartuchos, la cual se someterá a experticia para determinar si está o no relacionada con algún hecho ilícito”, informó la FGR.
En el operativo realizado por la Policía Nacional Civil (PNC) se capturó a 18 pandilleros de dicha pandilla, quienes serán procesados por organizaciones terroristas y extorsión, a otros se les sumará el delito de acoso sexual.
En otro hecho, la Fiscalía confirmó que el agente policial, José Baltazar Rodríguez Chávez, de 35 años de edad, capturado en un operativo policial junto a 58 pandilleros será enviado a prisión provisional por organizaciones terroristas y filtrar información de procedimientos policiales.
Rodríguez pertenecía a las filas de la Fuerza de Intervención y de Recuperación de Territorios (FIRT) y fue capturado elñ pasado 24 de enero.
Ante los casos de policías involucrados con pandillas, el director de la PNC, Howard Cotto dijo recientemente que todos los policías que delincan y favorezcan a pandilleros serán expulsados de la institución y presentados a Tribunales como cualquier otro ciudadano infractor.
“Toda la institución está empeñada a ganarse la confianza de la sociedad, en ganarse la colaboración de la comunidad y existen un pocos elementos que trabajan por restarle la credibilidad a la institución. Tenemos instrucciones precisas del Gobierno de expulsarlos”, dijo Cotto.
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El jefe policial acotó que detrás de las capturas de agentes se refleja la investigación policial para recabar los elementos de prueba del delito.
“Eso demuestra la disposición de nuestra institución a no tolerar ese tipo de hechos, nosotros los capturamos y con ello demostramos que no tenemos interés de que estos elementos sigan al interior de las instituciones”, sostuvo.
En 2016, más de 90 policías fueron detenidos por el cometimiento de diferentes delitos, entre los más comunes, vínculos con pandilleros. En 2015 fueron capturados 339 agentes por el cometimiento de diferentes ilícitos. En 2014, los capturados fueron 56, Según fuentes oficiales.