¡Lucha libre! ¡Yo le voy a los rudos! ¡Yo, a los técnicos!
El plan geopolítico regional y su correspondiente restauración oligárquica vía la Alianza para la Prosperidad del Triángulo Norte de Centroamérica (APPTNCA), sigue su curso imperturbable utilizando como instrumento para su implementación la lawfare o guerra mediante la manipulación de la justicia o “lucha contra la corrupción”. Ante el clamor del público asistente al campeonato de lucha libre entre dionisíacos y alvaricos, el árbitro geopolítico sancionó a militares, al caso Transurbano y, ahora, al caso la Línea 2, es decir, a los oligarcas corruptos que recientemente formaron un pomposo frente ciudadano contra la impunidad, al cual adhirieron con paroxismo la izquierda rosa y la derecha lila.
A estos casos clamados por el público asistente a la Arena Guatemala, la “justicia” les aplicó multas y reclusión domiciliaria. Y ahora, la Línea 2 da muestras de arrepentimiento cristiano y solicitud de clemencia al exultante populacho, además de pagar multas que redimen sus delitos. La puesta en escena funciona. El público progre se inclina por lo técnicos y abuchea a los rudos. Éstos son el ala fascista de la oligarquía, los diputados y el gobierno mismo. Y los técnicos son el ala corporativizada y moderna de la misma. Los rudos se conocen como alvaricos y los técnicos como dionisíacos. Con éstos (y con la geopolítica) está la izquierda rosa y la derecha lila (relevo generacional de la Línea 2).
El espectáculo concita los hipócritas entusiasmos del oenegismo ―que ha usurpado el lugar y la función de la sociedad civil―, a sueldo como está de organismos internacionales de financiamiento que aúpan la “acción política no-violenta” con sus golpes de Estado blandos, sus revoluciones de color, sus luchas contra la corrupción y su corrección política izquierdoderechista. Por ahí se los ve haciendo conatos de movilizaciones urbanas festivas que, esta vez, contrastan con la violenta revolución de color montada en Nicaragua ante una medida gubernamental “sugerida” por la agencia internacional de financiamiento FMI, para justificar reacciones manipuladas como la que ya dejó tres decenas de muertos. Y para quienes vean esto como “teoría conspirativa”, sólo revisen lo que ha ocurrido aquí y el anuncio que de todo ello hice en el 2015, 16 y 17. Nada conspirativo. Puro análisis concreto de la situación concreta. Y todo resultó cierto.
Ante la alegre lucha libre de hoy, se espera que las torvas negociaciones entre alvaricos y dionisíacos continúe, que el árbitro geopolítico siga partiendo salomónicamente al niño en disputa (la APPTNCA) y que la lucha de relevos entre rudos y técnicos siga hasta que haya nuevo Fiscal General. Por cierto, cualquiera que llegue a serlo, lo hará debidamente apalabrado por el árbitro para que este largo show ya vaya llegando a su fin. De hecho, el ruego de perdón de la Línea 2 se parece al inicio de un Grand Finale al estilo Las Vegas para que ―ya impuesto el plan geopolítico― sean ungidos para gobernar el país unos cuantos de la izquierda rosa y otros de la derecha lila (el partido no importa), y así dar la imagen ―que será recogida por CNN para el mundo― de que aquí hubo una revolución pacífica (ejemplo ante la rebelde Venezuela), y que los leves cambios para que todo siga igual culminen la restauración oligárquica y el reinado de la APPTNCA para lo que resta del siglo XXI.
¿Rudos y técnicos? ¡Bah! ¡Todos son enmascarados de plata! (Con perdón de El Santo).