Tras el asesinato del periodista saudí Jamal Khashoggim, quien fue víctima de 13 agentes de operaciones en el consulado de Arabia Saudita en Estambul, el pasado 2 de octubre. El fiscal General del reino, Saud a Mojeb, pidió la pena de pena de muerte para cinco de los acusados.
De los 13 delegados que llevaron a cabo el homicidio, cinco de ellos confesaron haber drogado y descuartizado al periodista, informó el miércoles el fiscal.
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Según las declaraciones de los agentes, luego de haberlo secuestrado, torturado y asesinado con una bolsa de plástico, entregaron el cadáver a un “colaborador turco” que se encargó de sacar sus restos del consulado.
Hasta el momento 11 elementos están siendo juzgado por el delito, mientras que el fiscal absolvió del caso al príncipe heredero, Mohammad bin Salman.
