jueves, 5 diciembre 2024
spot_img
spot_img

Es imposible no tener ideologí­a

¡Sigue nuestras redes sociales!

spot_img

Porque no se puede vivir sin creencias ni identidad

Ideologí­a es el conjunto de contenidos de conciencia (ideas) que le da identidad a cada ser humano. Esos contenidos pueden ser polí­ticos, religiosos, estéticos y demás. La ideologí­a es convicción por la ví­a de la creencia. Es subjetividad. Las ideologí­as suelen compartirse y organizarse grupalmente, lo cual las lleva a ser sistematizadas por intelectuales orgánicos con los grupos que históricamente las producen, formando así­ sistemas de creencias compartidas popular o elitistamente. Por este camino, las ideologí­as se vuelven escalas de valores, y paradigmas. Y se tienden a irradiar por medio de la propaganda en todas sus formas. En sus expresiones más extremas, las ideologí­as llevan a fanatismos, fundamentalismos y esencialismos de todo tipo. Y, en el caso de las ideologí­as polí­ticas y religiosas, es frecuente que desemboquen en guerras. Las ideologí­as son fundamentales en la formación de las identidades de las personas. La identidad se remite a la convicción acerca de quiénes somos en el plano nacional, religioso, racial, étnico, polí­tico, moral. Y tienen que ver con cómo imaginamos relacionarnos con el mundo. La ideologí­a no se limita a las creencias polí­ticas, de modo que es una tonterí­a hablar de “ausencia de ideologí­as”.

El neoliberalismo dice que ya no existen las ideologí­as refiriéndose a las convicciones polí­ticas llamadas de izquierda y derecha, las cuales se remiten (la primera) a la creencia de que las mayorí­as pueden llegar a vivir con bienestar y (la segunda) a que eso está circunscrito a las élites económicas por una ley natural. De estas convicciones se desprenden todo tipo de acciones sociales que llevan al enfrentamiento entre élites y pueblos. Es fácil deducir de todo esto que mientras exista un sistema basado en la apropiación privada del producto del trabajo socializado, estas ideologí­as pervivirán. Y que, consecuentemente, la idea de que ya no existen estas ideologí­as es parte de la ideologí­a de las derechas, que se encargan de preservar un sistema basado en el despojo del trabajo ajeno.

Es imposible no tener ideologí­a como lo es no tener identidad. Ambos asertos son absurdos catedralicios. Porque el ser humano no puede vivir sin creencias. El que haya izquierdas vendidas a las derechas no anula la ideologí­a de izquierda, aunque sí­ fortalece la ideologí­a de derecha. La ideologí­a de no tener ideologí­as es pues puro derechismo. Porque lo que se vende como ausencia ideológica supondrí­a que la contradicción que da origen a izquierdas y derechas ya haya sido superada, y eso a todas luces es falso. Cuando a usted le hablen de un proyecto polí­tico sin ideologí­as, póngase en guardia. Si se lo dice un derechista, es un neoliberal de hueso duro. Y si se lo dice un izquierdista, es simplemente un asqueroso traidor.

___
http://www.mariorobertomorales.info

¡Hola! Nos gustaría seguirle informando

Regístrese para recibir lo último en noticias, a través de su correo electrónico.

Puedes cancelar tu suscripción en cualquier momento.

Mario Roberto Morales
Mario Roberto Morales
Escritor, periodista y catedrático guatemalteco; ha sido Premio Nacional de Literatura de Guatemala. Ha escrito novelas, cuentos y ensayos

El contenido de este artículo no refleja necesariamente la postura de ContraPunto. Es la opinión exclusiva de su autor.

spot_img

También te puede interesar

spot_img

Últimas noticias