Agencias Internacionales
Roberto David Castillo, exdirectivo de la empresa hidroeléctrica Empresa Desarrollos Energéticos S.A (DESA) fue condenado a más de 22 años de prisión por ser el autor intelectual del asesinato de la ambientalista hondureña Berta Cáceres, ocurrido el 2 de marzo de 2016, hecho que estremeció a Honduras y a los defensores del medioambiente, especialmente en Centroamérica.
La ambientalista Berta Cáceres fue líder de las protestas contra el proyecto de construcción de la represa hidroeléctrica Agua Zarca antes de ser asesinada a tiros en su casa. Desde entonces se exige justicia.
El Tribunal de Sentencia de Honduras declaró que Roberto David Castillo, cuya empresa había recibido el contrato de construcción, había planeado el asesinato y contratado a los pistoleros.
Roberto Cáceres, hermano de la ambientalista, declaró a la prensa que seguirán luchando para llevar a juicio a más culpables, quienes son personas poderosas a nivel económico y político.
El empresario Castillo, quien fue presidente ejecutivo de DESA, también había sido un oficial de inteligencia del ejército, de ahí que algunos de los sicarios eran exmilitares.
En 2019 la justicia hondureña dio a conocer la condena de 30 años y 6 meses, para Sergio Ramón Rodríguez Orellana, empleado de Desarrollos Energéticos (DESA), así como 30 años y 6 meses para Douglas Geovanny Bustillo, sargento retirado, 30 años para Mariano Díaz Chávez, mayor de las Fuerzas Armadas, y 50 años y 4 meses para los otros cuatro: Edilson Atilio Duarte Meza, Elvin Eriberto Rápalo Orellana, y Óscar Aroldo Torres Velásquez. Estos fueron los sicarios que asesinaron a tiros a Cáceres.
El tribunal de justicia de Honduras encontró al empresario Castillo de que había utilizado sus contactos militares y pagado a informantes para coordinar y planear el asesinato de la destacada activista, quien fuera objeto del Premio Goldman en 2015 por su papel en frenar la construcción de la presa.
