Agencia de noticias Sputnik
El secretario general de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), António Guterres, está alarmado por la escalada de violencia en Ecuador y mantuvo una llamada telefónica este miércoles con el representante permanente del país, informó el portavoz del orgnaismo Stéphane Dujarric.
“Esta mañana el secretario general también habló por teléfono con el representante permanente de Ecuador, y puedo decirles que el Secretario General está muy alarmado por el deterioro de la situación en el país, así como por su impacto perturbador en las vidas de ecuatorianos”, dijo Dujarric durante una conferencia de prensa.
En las dos últimas jornadas se registraron en Ecuador varios hechos violentos, como el secuestro de policías y la retención de guías penitenciarios en varios penales, así como amotinamientos de reclusos y la quema de autos y explosiones en las calles.
Según los primeros informes, los presos se niegan a ser trasladados a otros penales, lo que habría desatado la actual crisis en el sistema penitenciario, la primera que afronta el presidente Daniel Noboa.
El Gobierno había anunciado al comienzo de esta semana la construcción de dos cárceles de máxima seguridad en el país.
Más temprano el martes, previo al anuncio presidencial, un grupo de delincuentes irrumpió en un estudio del canal TC Televisión de la ciudad de Guayaquil, mientras transmitía en vivo un programa periodístico, y sometió a periodistas y colaboradores, a quienes colocaron explosivos en sus cuerpos y les exigieron entregar los micrófonos.
En las imágenes transmitidas en vivo se observa cómo los delincuentes encapuchados amenazan al personal del canal y mostraban sus armas a las cámaras.
La policía informó posteriormente que los atacantes habían sido detenidos.
Tras el decreto presidencial, la Asamblea Nacional expresó su apoyo a las medidas del Ejecutivo en materia de seguridad y su respaldo a las Fuerzas Armadas y la Policía Nacional.
El respaldo incluye “la adopción de indultos y/o amnistías en los casos que sean necesarios para garantizar la tarea” de las fuerzas de seguridad, según un comunicado firmado por todos los partidos que integran la Asamblea Nacional.
“Nos encontramos trabajando en unidad, sin importar las diferentes corrientes políticas e ideológicas que representamos. La situación actual exige colaboración y cohesión”, dice el texto.
Ecuador tuvo en 2023 el año más violento de su historia, con más de 7.000 homicidios, lo que llevó al país a tener una de las tasas de asesinatos de las más altas de América Latina.
Tan solo hace cuatro años, Ecuador era uno de los países más seguros de la región.