Agencia Alemana de Prensa (dpa)
La fábrica de la automotriz estadounidense Tesla en Alemania se puso hoy oficialmente en marcha tan solo después de dos años del inicio de su construcción, entre halagos de políticos y empresarios.
“Este breve periodo de construcción de la fábrica puede servir también de referencia en otras áreas”, declaró el ministro alemán de Economía y Protección Climática, Robert Habeck, en relación a la planta situada en Grünheide (estado de Brandeburgo).
Asimismo, elogió el enfoque del jefe de la compañía, Elon Musk, como “una cultura corporativa audaz diferente” y comentó que la transición hacia los vehículos eléctricos reducirá el consumo de combustibles fósiles.
“(Hoy es) un día especial para la región, un día especial también para Alemania y un día especial para el cambio de la movilidad en Alemania”, añadió.
También se sumó a los elogios el canciller alemán, Olaf Scholz, quien destacó que la planta supone un paso hacia adelante en la industrialización del este del país. “De esta forma, el este se adelanta industrialmente”, dijo.
En relación al tiempo relativamente corto que llevó la construcción de la planta, Scholz añadió: “Alemania puede ser rápida”. Asimismo, puso de relieve la importancia de la industria de la electromovidad: “La movilidad eléctrica marcará la movilidad del futuro”.
Por su parte, el jefe de Tesla viajó a la inauguracióin para entregar a algunos clientes los primeros vehículos fabricados en la conocida como “gigafactoría”, que empleará a unas 12.000 personas y tendrá como objetivo producir unos 500.000 coches al año.
Respecto al cambio climático, Musk se mostró convencido de que el problema se resolverá en el futuro y consideró que la apertura de la fábrica de Grünheide es un gran paso en esa dirección. El empresario, de 50 años, escribió en su cuenta de Twitter: “Gracias, Alemania!”.
El primer modelo que se fabricará en Grünheide es el Model Y Performance, un coche de tamaño medio de unas dos toneladas de peso con una autonomía oficial de 514 kilómetros y una aceleración de cero a cien kilómetros por hora en 3,7 segundos. La empresa cifra el precio en 63.990 euros (70.440 dólares).
La nueva gran fábrica de automóviles supone también una presión añadida para las automotrices alemanas. Sin embargo, estas también están centrando sus esfuerzos en los coches eléctricos y tienen modelos comparables en el mercado.
El presidente de la Federación de la Industria Alemania (BDI), Siegfried Russwurm, elogió también la rapidez con la que Tesla construyó su fábrica.
“El ritmo de Tesla debe servir de modelo para los proyectos de inversión en Alemania”, declaró Russwurm a dpa. Añadió que el apoyo intensivo del gobierno regional aceleró considerablemente el proceso.
“A las empresas industriales alemanas les gustaría ver este tipo de respaldo para cada procedimiento de aprobación en todos los estados federados”, subrayó Russwurm.