Monseñor Gregorio Rosa Chávez ofició una misa este sábado en la Parroquia San Francisco, San Salvador, en la que se despidió del pueblo católico salvadoreño antes de viajar al Vaticano para ser nombrado cardenal por el Papa Francisco en persona.
“No me siento solo, sino todo lo contrario. Cuando ustedes vean por televisión los actos del miércoles 28 y de jueves 29, por favor encomiéndenme de manera especial a nuestro amado pastor Monseñor Romero. Como he dicho tantas veces, él es quien merecía estar en este lugar, pero el Señor le concedió la gracia desde el martirio y fue cardenal por la púrpura de su sangre”, dijo.
El religioso eligió la parroquia que preside desde hace varios años para despedirse de los feligreses. Allí recordó el legado del beato salvadoreño Óscar Arnulfo Romero, causa por la que se convirtió en el principal impulsor de su beatificación y santificación.
Monseñor Rosa Chávez dijo que seguirá manteniendo su cargo como Obispo Auxiliar y que seguirá trabajando como párroco de la Iglesia San Francisco. Además explicó que su labor como cardenal le permitirá formar parte del “senado del Papa”, y “ayudarle a gobernar la Iglesia”.
El religioso viajará la tarde de este sábado hacia Roma para participar el próximo 28 de junio en un consistorio en el que el Papa lo nombrará como el primer cardenal de El Salvador.
"Aún no sé cuáles fueron las razones para que el papa me eligiera, pero lo que sé es que él tiene un gran amor por este país, por la iglesia y por monseñor Romero, quien fue perseguido simplemente por decir la verdad", dijo el religioso a medios internacionales en mayo pasado.
Rosa Chávez nació en 1942 y fue ordenado sacerdote en 1970. El religioso posee una licenciatura en comunicación social por la Universidad Católica de Lovaina, Bélgica. Además, actualmente es presidente de Cáritas para América Latina y el Caribe.