El portal web del Vaticano confirmó este día que el Papa Francisco aceptó la renuncia del cardenal Gregorio Rosa Chávez, al cargo de obispo auxiliar de la Arquidiócesis de San Salvador.
Según Chávez, la dimisión se gestionó en 2017, cuando había cumplido con la edad límite establecida en los cánones 401§1 Y 411 del Código de Derecho Canónico de la Iglesia Católica, que es 75 años.
Asimismo, mencionó que el Papa aceptó la solicitud y “solo hacía falta ver cuándo se anunciaba a la gente”. Tras cumplir 80 años, el pasado 3 de septiembre, recibió una consulta del Vaticano, en la que se le consultaba cuál día proponía Chávez para comunicar la noticia.
El cardenal informó a los medios que decidió hacerlo este día, en el marco del día de San Francisco de Assis, como honor al Papa Francisco, quien según Chávez, comparte el mismo ideal de “la paz, los pobres y la ecología”.
Por su parte, la Nunciatura Apostólica en El Salvador expresó a través de un comunicado su “agradecimiento al señor por la larga, sabia, generosa y discreta labor del Cardenal Rosa Chávez para el progreso espiritual y material del pueblo salvadoreño”.
También, desearon “salud y fuerza para seguir dando testimonio de amor y entrega a la iglesia y a todo el pueblo salvadoreño para el bien del cual jamás ha ahorrado fuerzas, trabajo y abnegación”.
Con la aceptación de la renuncia, Chávez queda en calidad de “obispo emérito”, rol que le permitirá seguir teniendo voz, mas no así voto en las decisiones de la iglesia católica, como la elección de un nuevo Papa en un futuro. Mientras tanto, dijo que continuará como párroco de la iglesia por los próximos años.
El cargo que hoy terminó de forma oficial, comenzó el 3 de julio de 1982, fecha en la que El Salvador se enfrentaba en una guerra civil que terminaría hasta en enero de 1992.
Además, el 28 de julio de 2017, Rosa Chávez fue nombrado por el Santo Padre como primer cardenal de El Salvador, en la ceremonia del Consistorio en la basílica San Pedro.
