La embajadora de los Estados Unidos, Jean Manes, advirtió que los casos de corrupción en el país “no se tratan de un par de personas evadiendo la ley”. Más bien, indica que son el reflejo de “un sistema diseñado para ocultar un fraude que involucra miles de personas”.
Luego de que los expresidentes Elías Antonio Saca y Mauricio Funes fueron acusados por peculado y lavado de dinero por montos de $301 y $351 millones de fondos públicos, respectivamente, la embajadora recriminó el trabajo de las instituciones que deberían poner paro a la corrupción.
“¿Dónde están las demás instituciones? ¿Dónde se levantan las banderas rojas que preguntan por qué un funcionario se compra una finca o una casa en la playa?”, señaló Manes.
Además, la diplomática destaca que se debería comenzar por prevenir los delitos. “La aplicación de la ley debe ser la última línea de defensa en la lucha contra la corrupción. La acción de la Fiscalía debe ser el último recurso”, aseveró.
Luego de que Saca confesara que sí es culpable de desviar fondos públicos para favorecer sus empresas de comunicación, la Fiscalía General de la República (FGR) está a la espera de proceder con el juicio contra Funes, asilado en Nicaragua.
“La corrupción y el lavado de dinero dificultan la gobernanza y el desarrollo. Con los más de $650 millones que desviaron dos expresidentes se pudo disminuir el déficit fiscal o construir ocho hospitales”, dijo la diplomática en un evento realizado por la Asociación Bancaria Salvadoreña (ABANSA).