La discusión en la Asamblea Legislativa para lograr una ley de reconciliación continúa. Esta semana comenzaron con un intercambio con los representantes de las víctimas; entre ellos, el Grupo de Monitoreo Independiente.
En la propuesta, esperan que haya una participación más activa por parte del Ejecutivo. “Que siendo ya presidente, Nayib Bukele defina de forma transparente las características y establezca las condiciones para la creación “’mediante Decreto Ejecutivo”’ de un funcional y eficaz grupo de trabajo”, explicó Benjamín Cuéllar, miembro del Grupo de Monitoreo de Independiente y uno de los que promovió la demanda que permitió expulsar la Ley General de Amnistía en 2016.
Este grupo de trabajo, entre otras funciones, elaborar una propuesta de ley para “promover y alcanzar la dignificación de todas las víctimas de antes y durante el conflicto armado interno en El Salvador”, y además, propuestas de políticas públicas. Durante el actual proceso de formación de ley, el Ejecutivo se ha mantenido al margen. El Grupo sugiere que Bukele y su equipo tomen un rol más activo, también, en abrir el espacio a más grupos y personas.
Según lo planteado en el documento, pedirán a la Sala de lo Constitucional que extienda el plazo para poder tener listo un anteproyecto de ley de reconciliación. Así, pedirán que pueda pasar del 13 de julio al 13 de diciembre, cinco meses más, “para hacer bien la tarea”. La meta es poder acudir a hacer la propuesta este martes 28 de mayo.
Cuéllar citó al artículo 168 de la Constitución a los diputados, que obliga al gobierno a “procurar la armonía social, y conservar la paz y tranquilidad interiores y la seguridad de la persona humana como miembro de la sociedad”. Pero para Cuéllar, el ritmo de discusión que se ha sostenido en la Comisión Política de la Asamblea dificultará conseguir este objetivo. “Les quedan dos escasos días para formular una nueva propuesta de normativa que “’para bien o para mal”’ considere o desestime los aportes recibidos a fin de que esta Comisión Política y el pleno de la Asamblea Legislativa”, dijo Cuéllar, y agregó que si el presidente Salvador Sánchez sanciona la propuesta actual, “ni la historia lo absolverá”.
En el grupo participa también Juan José Dalton, quien sufrió secuestro y tortura durante la guerra. Es, además, hijo del poeta Roque Dalton, asesinado por grupos de la exguerilla y también es director de Contrapunto. “Han tenido a uno de sus presuntos criminales a la mano del presidente, ese señor se llama Jorge Meléndez” dijo Dalton. Expresó que en 10 años de gobierno del FMLN, “nunca le han pedido cuentas a ese señor” por su participación en el asesinato de Roque Dalton y de Armando Arteaga.
Dalton quiso ser interrumpido por el diputado Alberto Romero, quien presidía la mesa oficial, pero "agarró impulso y habló también de su reciente denuncia contra la Fuerza Armada, que en 1981 lo detuvo herido en Las Viertas, Chalatenango, y estuvo desaparecido temporalmente, fue torturado y no recibió atención médica, lo que constituye un crimen de guerra.
Para Dalton, la actual propuesta “va a ser avalar la impunidad” y urgió a los diputados, jóvenes y más expertos, que no aprueben la versión actual de la ley de reconciliación.