El expresidente de la República, Mauricio Funes, otorgó una entrevista a medios de comunicación nicaragí¼enses transmitida este jueves, en la que afirma que haber expuesto casos de corrupción que involucraban a connotados empresarios, y no permitirles tener poder sobre el Órgano Ejecutivo durante su gobierno, son las dos razones que tienen grupos de poder para perseguirlo, por lo que buscó protección en Nicaragua.
“Estando en El Salvador, recibí información de persona muy cercanas a poderosos grupos económicos del país donde me mandaban a decir que no escatimarían esfuerzos para verme en la cárcel y de ser posible, verme muerto”, dijo el exmandatario al canal 4 de la televisión nicaragí¼ense.
Funes expresa que las investigaciones que actualmente enfrenta por presuntos actos de corrupción, son un proceso revestido de proceso judicial pero que en el fondo es una persecución política, pues asegura que la derecha usa instituciones del Estado para su muerte civil o física
“No estaban dispuestos a perdonarme que les haya quitado el poder sobre el Ejecutivo y que haya exhibido algunos casos de corrupción donde aparecían mencionados algunos connotados hombres de negocios del país. Esas dos razones me llevaron a buscar asilo en Managua”, manifestó Funes.
El exmandatario asegura que solicitó asilo a Nicaragua por su situación circunstancial de trabajo en ese país, y porque considera que el gobierno de Daniel Ortega es respetuoso de su Constitución; además aplaudió la situación de seguridad y desarrollo económico que tiene el país vecino.
Asimismo, Funes confirmó que ha permanecido en contacto con dirigentes del FMLN quienes le reiteraron el peligro que correría si regresaba al país.
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Al respecto, el diputado del partido GANA, Guillermo Gallegos, aseguró este jueves estar en desacuerdo con la condición de asilado político que tiene el expresidente Funes en Nicaragua.
“No es posible que en el país se esté dando una persecución política. Eso es decir que el gobierno del FMLN persigue políticamente y eso no es verdad”, dijo Gallegos en la entrevista televisiva de TCS.
El también vicepresidente del Órgano Legislativo concluyó que esta situación pone en entredicho ante la opinión pública internacional al Estado y gobierno del FMLN porque acá no hay persecución política.
Por su parte el diputado del partido ARENA, Ernesto Muyshondt, dijo escuetamente que espera que la institucionalidad funcione en este caso.
“Que se sigan profundizando las investigaciones de la Fiscalía y que siga funcionando la institucionalidad (“¦) ojalá se le ponga fin a la impunidad que ha prevalecido y de la que él cree que se puede valer, apoyándose en un régimen dictatorial para evadir la justicia de nuestro país”, dijo Muyshondt.
Funes es procesado e investigado por la Fiscalía General de la República de El Salvador, por supuesto enriquecimiento ilícito y otros posibles delitos cometidos en su mandato 2009-2014.