Por Alessia Genoves
6% de la población salvadoreña percibe la corrupción como uno de los principales problemas del país. La respuesta es el resultado del reciente estudio de opinión pública de la empresa Cid Gallup que, sin embargo, incrementa dicha percepción al 2%; ya que en la encuesta divulgada el pasado 23 de febrero, el resultado era del apenas el 4%. Pese a ello, El Salvador se posiciona en el lugar más bajo, después de República Dominicana, que ocupa el 14%; y Costa Rica, que ocupa el 18%. En las antípodas, en Perú el que ocupa el primer lugar en la percepción de corrupción, con valoraciones que llegan al 46%.
El Salvador ha sido, pues, el último país con valoraciones positivas en torno al problema de la corrupción. Sin embargo, la organización Transparencia Internacional ha consignado una ponderación de 33 puntos en 2022, un valor que es inferior a los 36 puntos de 2020 (en períodos de pandemia de Covid19), que deduce una mayor proximidad en la percepción de la corrupción, de los Índices de Percepción de la Corrupción. Por si fuera poco, la organización Periodistas Sin Fronteras (RSF) sitúa a El Salvador en el lugar 115, entre los países en donde es muy difícil hacer periodismo, sólo por encima de vecinos latinoamericanos como Bolivia (117), Guatemala (127) y México (128).
Asociación de Periodistas de El Salvador (APES); no obstante, detalla en su último balance de agresiones contra periodistas, que evalúa el año fiscal 2022, que apenas se reportaron 147 presuntas agresiones contra periodistas y el ejercicio periodístico. La cifra sería, por otra parte, inferior respecto de las 220 presuntas agresiones reportadas en 2021; y que en el transcurso de los 4 primeros meses del año, apenas se han reportado 54 agresiones contra periodistas y su trabajo. Hay que añadir que representantes de la organización, como la presidenta Angélica Cárcamo, ha indicado que “no hay periodistas detenidos”, en el contexto del Régimen de Excepción de Garantías Constitucionales (27/03/2022-22/05/2023); como tampoco los hay en los registros de homicidios intencionados.
Percepción de Corrupción en El Salvador
ContraPunto observa que la percepción generalizada de la corrupción es menor, en la última encuesta de Cid Gallup, que los datos que se reportaron en la encuesta divulgada en la fecha del 22 de febrero del año 2023. Esto es así porque ninguno de los países evaluados llegó a tener un 61% de su población, con la tendencia a percibir la corrupción como el principal problema de su país. A éste dato obedece el caso de Perú, que hasta al última encuesta, bajó la percepción ciudadana de corrupción al 46%; un resultado que, sin embargo, es aún mayor al de los dos años anteriores: 38% en 2022 y 32% en 2021.
El Salvador, entretanto, es el país con menor percepción de la corrupción, respecto a los otros 13 evaluados por Cid Gallup, en ésta última entrega. El dato es, sin embargo, mayor al de la encuesta anterior, que consignó un 4% de las personas encuestadas a la misma premia; pero es aún respecto al 7% de la percepción atinente en la encuesta del 19 de octubre de 2022, y a la del 16% consignado en la encuesta del 10 de febrero del año 2021.
Iudop compartió estadísticas relativas a la percepción de la corrupción de las instituciones ministeriales, de acuerdo con la opinión ciudadana. No habría utilizado instrumentos directos, como la Corte de Cuentas de la República (CCR) ni los datos oficiales, expedientes o precedentes de la Corte Suprema de Justicia ni de la documentación que ofrecen organismos internacionales, como el Departamento de Justicia de Estados Unidos, y otros.
De modo que el Minsal habría sido identificado con hasta 7.8 puntos de las estadísticas de mucha corrupción, mayor que los 6.8 puntos del segundo año. También el Mineducyt incrementó lo 4.2 puntos -el segundo año- en la percepción de “mucha corrupción”, a los 6.9 puntos en el cuarto año. También el Mopt subió a los 10.3 puntos en la misma percepción, cuando en el segundo año fue de 8.7 puntos; el Ministerio de Relaciones Exteriores subió de los 5.3 puntos a los 6.3 puntos; el Marn ascendió de los 5.5 puntos a los 7.1 puntos y el Minec subió de los 9.4 puntos a los 11.1 puntos.
Sin embargo, el ritmo sería descendente para el resto de ministerios -la mayoría-. De modo que el Ministerio de Defensa bajó el criterio de la percepción de “mucha corrupción” a los 6.8 puntos, cuando en el segundo año era de 7.2 puntos; el Mitur pasó de los 4.6 puntos en el segundo año a los 4.1 puntos para éste año y el MJSP decreció de los 14 puntos en el segundo año a los 10 puntos en el período reciente. También en Micultura, la percepción de 4.3 puntos del segundo año pasó a los 3.8 puntos en el cuarto año; y el Ministerio de Gobernación bajó dicho medición, de los 8 puntos en el segundo años a los 7.6 puntos durante el cuarto año de gobierno.
Corrupción en LATAM
República Dominicana también redujo la percepción de la corrupción al 14%, siendo un resultado menor al 24% de la anterior encuesta; aunque mayor al 10% de la encuesta del 2022, y al 8% consignado en la encuesta del 2021. A continuación, es Costa Rica el tercer país con menor proporción de población que cree que la corrupción es el principal problema de su país; ésto es así por el 18% que comparte la misma valoración en la última encuesta; un resultado menor al 22% de la anterior encuesta; pero superior al 15% de la encuesta del 2022 y al 42% de la encuesta del año 2021.
México ocupa el 4º lugar, con el 22% que valora el tema a de la corrupción como el principal en su país, un resultado que -con diferencia de los anteriores países referidos- ya es superior al 21% de la anterior encuesta; al 19% de la encuesta de 2022 y al 17% de la encuesta de 2021. El caso es similar en Nicaragua, ya que el 23% de población considera que es la corrupción el principal problema del país, un resultado superior respecto al 22% de la anterior encuesta; y al 18% consignado en las encuestas del 2022 y del 2021.
Ecuador, sin embargo, ha reducido al 25% la percepción de la corrupción en la última encuesta, pues en la anterior, ésta llegaba al 37%; aunque es un resultado inferior respecto al 26% consignado en la encuesta del año 2022, pero igual a la del año 2021. Mientras que en Argentina, se consigna un 28% en la última encuesta; siendo mayor a la del 27% del año 2022 pero muy inferior respecto al 35% consignado en la encuesta del 2021. Una situación similar se observa en Honduras, donde la percepción de la corrupción subió al 29% en la última encuesta, cuando en la de febrero de 2023 era del 28% y en la de 2022 era del 20%; sin embargo, es superior al 45% en la encuesta de 2021.
34% de la población de Panamá, por otra parte, consideran que la corrupción es el mayor problema de su país; un dato menor respecto al 37% de la encuesta anterior; y aún menor respecto al 40% a la del año 2022, y al 35% del año 2021. También se redujo la percepción de la corrupción en Venezuela al 36% en la última encuesta, siendo menor respecto al 39% de la encuesta anterior, pero no menor o ifual al 33% de la encuesta del año 2022. Mientras que Guatemala apenas reduce la percepción al 39%, siendo 1% menor respecto al 40% de febrero de 2023; y aún menor al 42% del 2022, pero no mayor respecto al 35% del año 2021.
La #corrupción es un problema ampliamente extendido en numerosos países, y su impacto se manifiesta claramente en la percepción de los ciudadanos. La corrupción es citada como el problema principal en Perú, con un 46%, seguido de cerca por Colombia, con un 42%. #Latam #CIDGallup pic.twitter.com/2wS2mm5eWs
— CID Gallup (@cidgallup) June 30, 2023
Colombia, por su parte, ha bajado la percepción de la corrupción en apenas el 42% respecto el 44% de la última encuesta; pero no mayor respecto del 36% del año 2022 aunque menor respecto del 48% del año 2021. Mientras que Perú ha bajado la percepción de la corrupción en un 46%, cuando en la encuesta anterior era del 61%; pero es un resultado mayor respecto al 38% del año 2022 y del 32% del año 2021. Por otra parte, Cid Gallup no ofrece datos comparativos ni actualizados en el caso de Chile, donde la percepción de la corrupción era del 14% en febrero de 2023; ni de Bolivia, donde la percepción de la corrupción era del 18% en la encuesta de 2021.
Transparencia Internacional y El Salvador
Transparencia Internacional ubica a El Salvador en el puesto 116 entre los países con mayores IPC, en el mundo. Sus indicadores, como se ha demostrado, no se basan en la opinión pública; sino que se asignan, conforme a los hechos evaluados. Particularmente, la institución enumera entre sus indicadores, aquellos hechos relacionados con el abuso cotidiano; la malversación de fondos públicos; y las dificultades en el acceso a bienes y servicios.
En paralelo, no obstante, El Salvador ha elevado la persecución de la corrupción. Por ejemplo, hechos relativos a los de terrorismo, enriquecimiento ilícito y malversación de fondos públicos son 2 de los 24 delitos, cuya persecución penal ya es imprescriptible. Ello implica un factor de disuasión, con la persecución de la corrupción del Estado. Y aunque los registros de homicidios y feminicidios demuestran contracciones cuantitativas del 77% y del 50% hasta el año 2022, la persecución evidente y la percepción de los índices de corrupción en el país han incrementado.
Periodismo y El Salvador
147 presuntas agresiones contra el ejercicio de la libertad de prensa, no obstante, fueron enumerados por la organización, en el mismo cierre del año fiscal 2022, según APES. ContraPunto observa que éste último registro define una reducción del 68.38% respecto de las 220 agresiones contra periodistas que se reportaron en el cierre del año fiscal 2021, pese a que los datos de la organización definieron una tendencia al alza desde la apertura del Centro de Monitoreo de Agresiones Contra Periodistas, en 2018, hasta, precisamente, el año 2021.
77 presuntas vulneraciones habrían sido reportas, al cierre del año 2019; de las que, según Cárcamo, la mayoría “eran vulneraciones generadas desde el Ejecutivo”. Mientras tanto, en el año 2020, unas 125 presuntas vulneraciones fueron registradas; y, según la representante, algunas tenían qué ver con presuntas “restricciones al acceso de conferencias de prensa” y de supuestas “declaraciones estigmatizantes”.
54.09 puntos acumula El Salvador, en los indicadores de libertad de expresión, establecidos por la organización Reporteros Sin Fronteras (RSF). La reciente calificación es menor respecto a la puntuación de 69.51 puntos que la organización estableció en el año 2021.
RSF también pormenoriza los indicadores de libertad de expresión. De modo que el indicador político llega a los 42.94 puntos; el indicador económico, a los 39.07 puntos; el legislativo, a los 53.22 puntos y el social, a los 62.86 puntos. Mientras que el indicador de seguridad, a su juicio, es de 62.37 puntos.
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