La violencia es un fenómeno que continúa trastocando a la población salvadoreña, su complejidad y origen permite verla con lupa desde múltiples aristas. El impacto económico -pese a ser uno de los menos abordados- es uno de los que reflejan claramente la incidencia de la problemática en términos monetario.
El costo económico de violencia para el Gobierno salvadoreño, empresas y hogares asciende a $4,026.3 millones, lo que equivale al 16% de Producto Interno Bruto (PIB) nacional, así lo confirmó este miércoles la Red de Investigadores del Banco Central (REDIBACEN).
Para tener una mejor noción del impacto de la cifra, Margarita Peñate, expositora del informe “Estimación del Costo Económico de la Violencia en El Salvador 2014”, indicó que la cifra estimada equivale a dos veces la factura petrolera del país, el 97% de la recaudación de impuestos en el país, al 97% del total de remesas que recibe el país en un año y al 44% de los depósitos bancarios.
Como antecedente, en 2006 el importe por violencia en el salvador rondaba el 10.8% del PIB, ya para 2013 según el Instituto de Economía y Paz, el país alcanzaba el 14.5 %.
El impacto en cinco esferas
La investigación arroja cinco líneas en las cuales se verifica el impacto de la violencia: gastos en instituciones, atención en salud, prevención, impacto sobre agentes económicos privados y costos de oportunidad ““ producción e inversión.
Los gastos médicos ““ hospitalarios que comprenden la atención a víctimas de violencia, suman $19.5 millones, lo que representa el 48% del presupuesto del Hospital Rosales y el 72% del Hospital de niños Benjamín Bloom.
Por otro lado, las instituciones de la red pública desembolsan en tareas de prevención, seguridad y combate a la delincuencia $584.4 millones, lo que equivale al 12% del presupuesto general del la nación, 66% del presupuesto orientado a educación, 73 % del servicio de la deuda pública, y al 100% del presupuesto de salud.
El gasto en prevención y servicios como la seguridad privada en 2014, ronda los $171 millones. Los hogares gastan $14.9 millones y en el caso de las empresas $157.00 millones. Por sectores los más afectados son: servicios con $87.2 millones, comercio $38.9 millones y la industria con $27.3 millones.
A la vez, el desembolso en prevención equivale al 62% del presupuesto de Seguridad Pública y casi cinco veces el presupuesto del la Fiscalía General de la República (FGR).
El costo en el grupo de agentes económicos privados suma $1,303.5 millones, en este rubro entra extorsiones, robo, hurto a empresas y hogares. Todos estos son calificados como costos directos, sin embargo, el estudio también habla de costos indirectos: costo de oportunidad o efecto en la inversión.
Tomando en cuenta datos del Programa de las Naciones Unidas para El Desarrollo (PNUD), el documento señala que el crecimiento de la inversión privada se ve impactado en un 16% a la baja debido a la violencia, lo que significa que este rubro percibió alrededor de $28.7 millones en 2014.
También se habla del efecto sobre la producción que refleja el costo monetario por la población que ha dejado de producir por estar privada de libertad, pertenecer a pandillas, incapacidad por ser víctima de la violencia, familiares de victimas y migración. Este suma los $1,170 millones en 2014.
Lectura en materia de desarrollo económico
El presidente del Banco Central de Reserva (BCR), Oscar Cabrera, explicó que los resultados del estudio confirman que la violencia y la inseguridad conforman “una restricción que inhibe” la inversión y el crecimiento. El 16% del PIB que el país perfila como gasto, configura el mayor porcentaje a nivel centroamericano
En contraste con las cuantiosas necesidades de muchos salvadoreños afectados por el fenómeno, algunos sectores están floreciendo producto del mismo. Entre ellos destaca la seguridad privada y empresas que brindan servicios de seguridad interna en casas y empresas.
El conocimiento de estos datos, según Cabrera brinda nuevos insumos a las autoridades para evaluar mejor las medidas y la forma en laque se orientan los esfuerzos en materia de seguridad.
Margarita Peñate, señaló que el documento es un esfuerzo por cuantificar el fenómeno de la violencia y expresar en términos monetarios teniendo como eje clave las consecuencias de la problemática. Actualmente El Salador es uno los países del llamado triangulo norte, donde las tasas de violencia son cada día más preocupantes y según las cifras más recientes se contabilizan 49 homicidios por 100 mil habitantes.