A Marvin Aguilar
Ingresar en una contienda electoral termina regularmente en saborear el éxito que encamina al poder político o, todo lo contrario. Prepararse para sufrir una derrota comúnmente no suele tomárselo en cuenta en ningún momento de la campaña.
Nuevas Ideas celebró las primeras elecciones internas el pasado domingo 19 de este mes. La modalidad fue totalmente virtual dado que el partido pretendía evitar contagios del coronavirus entre los afiliados. Los resultados de estas primarias han provocado un notorio descontento entre muchos afiliados que recurren a calificar como fraudulentos estos comicios del partido. En redes sociales abundan comentarios y vídeos que desacreditan el triunfo de quienes sí resultaron ganadores. Inclusive el magistrado del Tribunal Supremo Electoral, Julio Olivo, reveló en una entrevista televisiva que en tan solamente unos días se habían recibido más de una decena de recursos exclusivamente contra las elecciones internas organizadas por Nuevas Ideas.
El triunfo que obtuvieron muchos precandidatos se debió a una apuesta constante por el trabajo territorial logrando penetrar en varios puntos estratégicos y construyendo así una amplia fuerza social de afiliados dispuestos a votar decididamente. Este tipo de alianzas de confianza entre los electores y los precandidatos se gestó compleja y detenidamente en un largo período de trabajo. En otros casos, la victoria respondió a una serie de acciones estratégicas con las cuales lograron despertar el interés de los afiliados a través de mecanismos, negociaciones, compromisos o apoyo inmediato a las necesidades de los afiliados, como las de alimentación, por ejemplo.
Las voces críticas que han surgido no deben ser descuidadas por las autoridades más significativas del partido. Conviene que se muestre un genuino interés del concejo nacional en apoyar a aquellos afiliados descontentos con los resultados hasta donde sea posible. El Instructivo para Elecciones Primarias de Nuevas Ideas define que quienes no resultaron electos contaban con 24 horas para interponer recursos de revisión o revocatoria ante la Comisión Nacional Electoral.
En suma, el primer ejercicio de elecciones internas de Nuevas Ideas cuenta ahora con la primera experiencia para trabajar en todo tipo de mejoras. Quienes no fuimos electos deberíamos recordar que las funciones y objetivos que debe cumplir todo partido político en El Salvador no se limitan únicamente a la conquista del poder público sino a la contribución y defensa del sistema democrático, a la promoción de una cultura de paz y al análisis de la realidad nacional; también a la contribución por la educación, formación y participación política social.
Que Nuevas Ideas no caiga en prácticas de partidos tradicionales es una responsabilidad de todos los afiliados que independientemente de los resultados hemos decidido mantener una actitud emocionalmente inteligente para no salir huyendo ante esta primera derrota y hemos optado por comprometernos más a incidir internamente para que los postulados del Estatuto de Nuevas Ideas se vuelvan una realidad todavía más certera.
