El siguiente es un comentario escrito hacia a mi por un joven miembro de La Luz del Mundo de San Miguel y seguidor de Caleb Navarro y Suni Cedillos candidatos a diputados por San Miguel por Nuevas Ideas. Todos miembros de la misma iglesia: «Aldair Sánchez: Sos un pendejo sin cerebro maje. Porque seas de una u otra religión no te quita derecho como ciudadano. Sos un hijo de puta bastardo como se te ocurre mencionar una religión cuando tu por ser homosexual no crees en Dios por ser ateo estas como estas sos uno más de los mismos de siempre como pretendías ganar una diputación siendo la basura que sos. El 90% somos catolicos cristianos y de la Luz del Mundo no ensucies las religiones sacándolas por tu sucia boca ateo homosexual».
Luego de mi artículo CEO de Dios, como ya lo hizo en pre-campaña el candidato Navarro lanzo una jauría de troles para contestar en forma pública y en privado lo que él no puede hacer porque quedaría al descubierto su enojo-ego cuando se aborda el tema de la iglesia donde su familia es pastora. Transcribo el comentario de Aldair Sánchez porque es uno que no es trol anónimo y, además, porque siendo profesor universitario me sorprende la cantidad de odio y fanatismo que puede llegar a impregnarle una religión a alguien. Mis artículos entonces cobran sentido y legitimidad al expresar lo peligroso que el discurso de odio se instale como oficial en Nuevas Ideas. ¿Debe sorprendernos el odio de Aldair Sánchez? No. Ya los radicales islámicos usan a los jóvenes para hacerse matar con la esperanza de un paraíso con mujeres y mieles. La promesa es la esperanza de los creyentes, pero esta no debería de llevarles a instalar una hoguera contra todo el que no piense como ellos.
Veamos, La Luz del Mundo es una secta que evolucionó a iglesia y en su actual proceso de mundialización ha sido objeto de estudio por académicos y teólogos de otras religiones. No siempre les gustará lo que se concluya de ellos, como tampoco a los musulmanes, catolicos, mormones, testigos de Jehová o cientologia les gusta lo que de ellos concluyen periodistas, investigadores y la ciencia. Así será, siempre. Por eso no me detendré en mi análisis sobre el peligro (viejo debate) de usar la fe y creencias de la gente para hacer política partidista. La Luz del Mundo está obligada a ser congruente con lo que dicen y piensan con lo que actúan como también todas aquellas iglesias de mayor antigüedad y las que vengan.
La diatriba de Sánchez en mi Facebook me permite desmontar ese discurso que haciendo uso del grito, la histeria, insulto y descalificación no busca responder el meollo del asunto sino mostrarse como juez y parte y obligarme a ya no escribir por miedo a que me siga diciendo lo que él cree que es denigrante. No me voy a callar, porque el fanatismo no puede derrotar a mi verdad.
Sánchez comienza insultando, pero luego plantea un argumento: «Porque seas de una u otra religión no te quita derecho {a ser diputado} como ciudadano» cierto, y mi punto no es su filiación religiosa Navarro y Cedillos tienen el derecho a ser de la fe que deseen y aspirar a un cargo de elección popular. Pero afiliar a un buen número de feligreses a un partido político para ganar primero puestos de estructura y luego candidaturas a nivel nacional ¿es moral y éticamente coherente con la adhesión a la laicidad de la sociedad que acepta La Luz del Mundo? ¿Por qué no convencer a catolicos, evangélicos, cristianos, pentecostales, agnósticos y escépticos de que eres buen candidato más allá de asegurarte un número con la feligresía de una iglesia donde posees influencia? ¿Qué diferencia hay entre eso y que grupos económicos o narcos patrocinen candidaturas? Está suficientemente claro con los casi 50 candidatos que llevan solo en San Miguel para diputaciones, concejales y alcaldes que hay una línea de iglesia. No se trata de que denominación sean se trata de que expliquen esta masiva participación en política. El secretismo y el disimulo es lo peligroso porque generalmente siempre esconde un fin último que visto lo visto en el resto del continente esas iglesias coaptaron finalmente el poder político para impulsar una agenda religioso-popular que termina en conflictos sociales porque todo resulta ser pecado.
continua, con lo que será el nudo de su narrativa: «Sos un hijo de puta bastardo como se te ocurre mencionar una religión cuando tu por ser homosexual no crees en Dios por ser ateo estas como estas sos uno más de los mismos de siempre como pretendías ganar una diputación siendo la basura que sos». Las iglesias ultra conservadoras, verticales, milenaristas y restauracionistas suelen imponer este discurso a su feligresía (por eso mismo el bochornoso y abominable suceso acontecido con Joaquín Naasón Guzmán acusado de 36 delitos sexuales con niñas y niños debe ser un shock a la moral de esta iglesia). Aquí el joven Sánchez se mete hablar de ciencia habiendo leído un solo libro en su vida. No es cierto que todos los homosexuales sean ateos, hay muchos creyentes en Dios y están incluso en su iglesia. Lo que pasa es que les toca llevar doble vida o disimular para no ser discriminados y terminar viviendo en la calle y, leyendo el odio que posee Sánchez lo mejor que pueden hacer es ocultarse. Luego no es cierto que yo sea ateo (en mi casa tengo una réplica de Xipetotec, Dios Lenca) soy deísta según Baruch Espinoza y, me rijo por principios budistas y en lugar de hostia como sushi. Pero ese es un tema para lo cual muchos no están preparados para leer.
Y finalmente me escribe: «como pretendías ganar una diputación siendo la basura que sos» aquí, me ayuda a revelar el ataque sistemático que en baja intensidad mantuvieron mis competidores de La Luz del Mundo en las internas para convencer a los votantes que no votaran por mí. Es decir, el argumento de que yo ataco por sus creencias a Navarro y Cedillos fue y es el que ellos usan para desacreditar no solo mi persona sino una posible candidatura. ¿Si no es problema ser de la Luz del Mundo para ser candidato por qué tiene que inferirse que otras circunstancias si lo son? A menos que su idea de sociedad diferenciarnos entre puros e impuros. Eso no lo responde el joven Sánchez porque eso demanda pensar con el cerebro y no con el hígado y haber leído más de un libro.
Corolario:
Yo no estoy resentido por haber perdido las internas. No las perdí. El resultado de San Miguel fue un acuerdo entre personas para dejar una lista que no tuviera independencia, obedientes y para cumplir compromisos como está sucediendo con la forzada coalición que quieren imponer para llevar a Wil Salgado como alcalde y que los candidatos a diputados de La Luz del Mundo callan. Allí miren mi derrota, no en los votos o por falta de trabajo territorial. De ser eso Zonia Hernández Martínez sería la primera casilla y no los candidatos de La Luz del Mundo.
