Wall Street inició la semana con destacadas ganancias tras varias jornadas de retroceso con una buena jornada para Apple, que consiguió paliar la importante caída de Boeing, afectada por el accidente de aviación de Ethiopian Airlines del pasado domingo.
El Dow Jones de Industriales, que agrupa las 30 principales empresas que cotizan en el parqué neoyorquino, consiguió cerrar con un ascenso de más de 200 enteros gracias al empuje de la tecnológica Apple, que subió un 3.46 % tras recibir un espaldarazo por parte de una importante institución financiera estadounidense.
Y es que Bank of America Merrill Lynch dio a conocer hoy que, según su análisis, la calidad de las acciones de Apple ha salido del terreno neutro, ya que la reciente devaluación de las mismas supone una oportunidad de compra para los inversores.
Prevé, por lo tanto, que las acciones del gigante tecnológico alcanzarán en los próximos 12 meses los 210 dólares, en lugar de los 180 pronosticados previamente.
Facebook también tuvo un buen día, al avanzar un 1.46 % después de que otra compañía de análisis, Nomura Instinet, recomendara la compra de sus acciones, una subida a la que se unió Nvidia, que se apreció en un 6.97 % tras anunciar la compra de Mellanox Technologies por 6,800 millones de dólares.
Los otros dos indicadores de Wall Street vivieron asimismo una buena jornada, con un incremento del 1.47 % del S&P 500, y del 2.02 % para el Nasdaq.
Con estos movimientos, el parqué neoyorquino esquivó los efectos del importante descenso del 5.33 % de Boeing, uno de los pesos pesados de Wall Street, tras el accidente aéreo protagonizado el domingo por uno de sus aparatos, el 737 MAX 8, que le había comprado la aerolínea Ethiopian Airlines, y que dejó 157 muertos.
Se trata del segundo avión de este mismo modelo en accidentarse en los últimos meses en condiciones similares, minutos después de despegar, por lo que se teme que se trate de un fallo mecánico o tecnológicos.
Con la buena jornada bursátil de hoy, Wall Street recupera algo de terreno tras las pérdidas de la semana pasada, la peor que se registró en 2019, arrastrada por las preocupaciones de una posible ralentización de la economía global, y que llevó a un retroceso semanal de más del 2 % para los tres principales indicadores.
