El ministro de Hacienda, Alejandro Zelaya, informó que el Estado tendrá que desembolsar hasta un total de US$50 millones para poder subsidiar el combustible por dos meses, tras el anuncio de una nueva alza en los precios de la gasolina y el Diesel en El Salvador.
Las declaraciones de Zelaya obedecen a una orden del presidente de la República, Nayib Bukele, quien dijo que el Estado asumirá el incremento de los precios y por eso ordenó a la Asamblea Legislativa una plenaria extraordinaria, para poder hacer una reforma transitoria a las normativas que contienen las regulaciones de los combustibles, que consiste en fijar en los próximos días los precios máximos de los Combustibles.
“He enviado una iniciativa de ley a la Asamblea, para que el Gobierno absorba el nuevo incremento del precio internacional de los combustibles y que los salvadoreños no paguen ni un centavo más. Esto se suma a las otras medidas para intentar contener la inflación mundial. No solo de los combustibles, sino toda la cadena que se ve afectada con los precios”, dijo el mandatario.
Agregó: “Hemos diseñado en esta tarde un nuevo decreto donde prácticamente estamos subsidiando los combustibles para poder mantener el precio actual”.
El Ejecutivo ya había ordenado el pasado 22 de marzo una reducción escalonada del Impuesto al Valor Agregado (IVA), la eliminación de los US$0.10 del “impuesto de guerra” y US$0.16 correspondiente al subsidio al transporte.
Ante esto, el titular de Hacienda llegó al borde de las 9 de la noche a la Asamblea Legislativa, para presentar la iniciativa emitida por Bukele.
“Vamos a fijar los precios, en los que fueron estipulados durante esta quincena, para que continúen los salvadoreños pagando los mismos $4.14 que pagaban en algunos casos, $4.32 para otros casos, dependiendo el tipo de combustible, pero esta vez establecimos un mecanismo con los distribuidores de combustible a nivel nacional, para que el incremento de los precios pueda ser asumido por el Gobierno, a través de un subsidio a estos”, explicó Zelaya.
El ministro explicó que la iniciativa busca fijar los precios de los combustibles a partir de este martes 5 de abril, tomando como base los precios de la última quincena, de acuerdo a las reducciones producto de las medidas anteriores.
“Hemos tenido varias reuniones con los importadores de combustibles, técnicos del Ministerio de Economía y con el presidente de la República. Básicamente la medida nos estará costando US$12.5 millones cada quincena que esté vigente, vamos a monitorear el precio, estamos diciendo que estaríamos llegando a un máximo de US$50 millones para ese subsidio si la situación continúa”, detalló.
Por su parte, la ministra de Economía, María Luiza Hayem, reiteró que la iniciativa consta de dos componentes: fijar los precios máximos de los combustibles, y que el Gobierno pueda absorber ese incremento de los combustibles reciente.
“Los salvadoreños se estarían ahorrando hasta más de 0.80 centavos por galón cada vez que vayan a comprar gasolina o Diesel”, explicó la ministra Hayem.
También explicó que el mecanismo que se va a implementar en esta medida consta también de una alianza con las empresas importadoras de combustible, la cuales tendrán “la obligación de pasar este subsidio que el Gobierno estará canalizando por medio de estas importadoras, pasarlas a las estaciones de servicio”.
Agregó que las sanciones, de incumplir esta medida, podrían llegar hasta 500 salarios mínimos para las empresas que importadoras que no trasladen ese subsidio.