El gobierno por medio del sistema de seguridad y de salud ha desplegado a trabajadores en los alrededores de las agencias bancarias del país para mantener medidas sanitarias y auxiliar a personas de la tercera edad que llegaron a retirar el beneficio económico otorgado por el Gobierno de El Salvador por la emergencia por COVID-19.
“Estamos pidiéndole a la población que guarde un metro y medio de distancia, también les estamos aplicando alcohol gel y les solicitamos que guarden los cuidados de limpieza, así como el constante lavado de manos. Eso estamos haciendo en todos los bancos”, expresó Carina Rivas, enfermera coordinadora del Sistema Básico de Salud Integral (SIBASI) de La Libertad.
Mientras policías brindaban seguridad a las personas en espera del bono, militares ordenaban por prioridad a los adultos mayores para ser atendidos por los empleados bancarios.
El ministerio de Gobernación, a través de sus gestores, entregó agua embotellada a los ciudadanos que esperaban ingresar a las sucursales y recibir la ayuda económica. Este apoyo se sumó a los esfuerzos de ministerio de Salud, PNC y FAES para brindar atención médica y de seguridad durante las jornadas de entrega del subsidio de $300 que autorizó el Presidente Nayib Bukele designado a los salvadoreños que no cuentan con un ingreso económico regular.
“Es una bendición que el señor Presidente Nayib Bukele nos ha dado. Con esto voy a poder comprar mi comidita y mi medicina”, expresó María Laura Rivas después de recibir la ayuda económica.