El presidente de la República, Salvador Sánchez Cerén, expresó este jueves su apoyo a la iniciativa que busca canonizar al sacerdote y mártir, el padre Cosme Spessotto, que fue asesinado el 14 de junio de 1980 por miembros del cuerpo de seguridad mientras se encontraba en la Parroquia de San Juan Nonualco, departamento de La Paz.
“Como Presidente de la República, me uno a esta petición de la Iglesia católica, hacemos votos por la pronta canonización del padre Cosme Spessotto, pastor y mártir del pueblo salvadoreño”, dijo el mandatario durante la conmemoración del 38 aniversario del martirio del religioso.
Sánchez Cerén además pidió perdón a nombre del Estado salvadoreño por las violaciones de derechos humanos cometidas por miembros de los cuerpos de seguridad durante el conflicto armado (1980-1992).
“En nombre del Estado salvadoreño pedimos perdón por todas las acciones cometidas en el pasado y que violentaron los derechos humanos”, expresó.
Según las investigaciones, el religioso fue asesinado mientras oraba antes de oficiar misa y fue abatido a balazos por miembros de los cuerpos de seguridad frente al altar de la Iglesia Parroquial.
El religioso de origen italiano denunció constantemente las injusticias que se cometían durante el conflicto armado, y ayudó a las familias más pobres, víctimas de la guerra, a reconstruir sus vidas en ese contexto bélico. Spessotto insistió en el cese a la violencia y el fomento del diálogo, algo que el mandatario destacó.
“Su mensaje de amor y perdón debe quedar en los corazones de todos los salvadoreños y salvadoreñas”, expresó.
Sánchez Cerén añadió que su gobierno tiene el compromiso de asegurar que los actos que ocasionaron dolor y sangre a la iglesia y a la sociedad se repitan.
Fray Cosme llegó a El Salvador el 4 de abril de 1950 y le fue asignada la Parroquia de San Pedro Nonualco, ubicada en el departamento de La Paz. En su instancia como párroco logró la simpatía, cariño y respeto de los lugareños y al cabo de un tiempo fue transferido a la iglesia de San Juan Nonualco.