“Nos levantamos muy temprano a trabajar y sin ninguna esperanza; no ha habido Gobierno con una visión a favor de las mujeres trabajadoras. Necesitamos que salgan a ver la realidad para ayudar a la mujer que está aportando al país” expresó, Magdalena Ríos, vendedora informal que se une al “Paro Internacional de Mujeres” (PIM) a ejecutarse el Día Internacional de la Mujer, este 8 de marzo.
El PIM es un movimiento organizado por mujeres de 46 países del mundo, incluyendo El Salvador, como respuesta a la violencia social, política, moral, verbal y legal que enfrentan las niñas, adolescentes y mujeres adultas a nivel mundial.
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Ríos asistirá al movimiento junto a organizaciones salvadoreñas que velan por el cumplimiento de los derechos de las mujeres para proclamar respeto, igualdad y oportunidades. “Las mujeres estamos siendo usadas, cuando hay elecciones los políticos nos regalan flores, nos saludan, no queremos eso, queremos nuestros derechos”, explica.
En el paro, varias organizaciones exigirán al Estado eliminar todas las normativas políticas y prácticas que discriminen a las mujeres. Además pedirán un mayor acceso a educación sexual con enfoque científico y laico, la despenalización el aborto terapéutico, eugenésico y ético para garantizar el derecho a la salud y el derecho a decidir libremente.
Las activistas también piden al Estado que genere una estadística que permita comprender la discriminación y violencia contra mujeres y que establezca mecanismos de elección a cargos políticos que garanticen la participación de mujeres.
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Las mujeres que decidan participar en el PIM tienen la opción hacerlo mediante estas actividades: no asistir a labores remuneradas, no realizar tareas domésticas ni de cuidados, parar labores por algunas horas, vestir de negro o morado y postear en redes sociales la situación de las mujeres en el país con la etiqueta #MujereseEnHuelga.
“¿Qué pasaría si todas las mujeres dejaran de lavar los trastos o si dejarán de tener hijos? El hecho de que las mujeres paremos o decidamos no hacer algo puede tener una gran influencia en el Estado, eso queremos, decirles que las mujeres queremos que se tomen en cuenta y seriedad nuestras demandas”, dijo la líder feminista, América Romualdo.
Romualdo añadió que el movimiento no se trata de un acto exclusivo para mujeres, sino para toda la ciudadanía que juega un papel fundamental en la lucha por la igualdad de derechos y oportunidades y combatir el cometimiento de feminicidios.
Cifras brindadas Ministerio de Justicia y Seguridad Pública (MJSP) reflejan que en 2016, un total de 523 mujeres fueron asesinas; al día se contabilizaban entre dos y tres feminicidios. En lo que va de 2017 se han reportado 54 casos.
Asimismo entre los delitos de feminicidio, sexuales, físicos, patrimoniales y laborales, las autoridades han recibido un total de 20 mil 338 hechos durante 2016, según el MSJP.