La epidemia de inseguridad que infecta al país ha cobrado la vida de 4.585 personas en lo que va de 2016, sin embargo autoridades de Seguridad afirman que producto de las medidas antiviolencia, existen 1.037 homicidios menos en comparación a los ocurridos en 2015.
De enero al 31 de octubre de 2015 se reportaron un total de 5.622 homicidios, ese año El Salvador se posicionó como el país más violento de Centroamérica con una tasa de 104 asesinatos por cada 100 mil habitantes, ante esto, la Organización Mundial de la Salud (OMS) lo diagnosticó con epidemia delincuencial.
Ante la grave situación el Gobierno implemento, el pasado 29 de marzo, una serie de medidas de emergencia en las zonas pandilleriles y en seis centros penales, no obstante, el país sigue derramando sangre, a diario 12 personas son asesinadas y la tasa sigue elevada a 72.85 por cada 100 mil salvadoreños.
En octubre del presente año se registraron 406 muertes violentas, en el mismo periodo de 2015, se reportaron 684 homicidios.
Autoridades de seguridad afirman que en todos los delitos comunes que se desarrollan en el país existe una reducción de 11.5%. En 2015, la incidencia fue de 75.7% y en lo que va de 2016, se ha reducido a un 67%.
Sin embargo, el delito de hurto y homicidio culposo (personas que fallecieron debido a accidentes de tránsito) han tenido un incremento del 1.9% en comparación a los ocurridos en 2015.
“A siete meses de aplicadas las medidas extraordinarias existe una reducción general de delitos y esperamos aumentar este porcentaje al cerrar el mes de diciembre. Si esta reducción continua vamos a cerrar el 2016 con 1.300 homicidios menos”, dijo el vicepresidente de la República, Oscar Ortiz.
Ante las estadísticas, el analista político, Juan José Martel afirma que las medidas de seguridad deben seguir desarrollándose en el país, “pues reflejan resultados positivos”.
“Es real que los índices de violencia comenzaron a bajar a partir de abril, esto va a dar un promedio menor a fin de año en distintos actos de violencia registrados en años anteriores, (“¦) efectivamente hay una caída de los índices”. Dijo Martel.
El analista acotó que si el 2016 termina con menos homicidios en comparación al 2015, el Gobierno tendría una “victoria pírrica”.
“Tienen que tocar el problema de fondo, entrar más a la parte del territorio y no solo controlar los centros penales y las extorsiones, ahí es donde se les está presentando más el problema” manifestó el experto.
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