Por Sabina Crisan (dpa)
Múnich, 17 nov (dpa) – Uno de cada siete trabajadores en Alemania es extranjero, por lo que ya representan alrededor del 15 por ciento de los empleados registrados en la seguridad social, de acuerdo con datos de la Agencia Federal de Empleo de Alemania (BA).
En algunos sectores, esta participación es aún mayor, y está en aumento. “Hoy en día ya hay muchos sectores que dependen fuertemente de los trabajadores extranjeros”, dijo el experto en migración del instituto de investigación económica Ifo, Panu Poutvaara. Aquí, un panorama de la situación.
Sectores con una proporción especialmente alta de extranjeros
De acuerdo con Poutvaara y las cifras de la BA, de marzo de 2023, hay una proporción especialmente alta de migrantes entre los trabajadores de los servicios de limpieza (41 %), elaboración de alimentos (38 %), la construcción de edificios e ingeniería civil (33 %) y el turismo, la hotelería y la hostelería (32 %).
Los inmigrantes también están claramente sobrerrepresentados en el sector del transporte y la logística y en la agricultura. La participación de los extranjeros aumentó últimamente en general. En el verano (europeo) de 2021 aún era algo más baja.
La necesidad
La economía ve con buenos ojos la inmigración laboral. “Tenemos que amortiguar el impacto del cambio demográfico en los próximos años. Sin trabajadores cualificados y mano de obra extranjera no podremos mantener nuestro bienestar”, afirmó la confederación alemana de empresarios BDA.
Uno de los elementos clave para esto es que “nos volvamos rápidamente mucho más atractivos para los inmigrantes cualificados”, señaló.
Martin Lange, experto en mercado laboral del Centro de Investigación Económica Europea (ZEW) de Mannheim, subrayó: “Sin inmigración, nuestro bienestar está en peligro”. Indicó que Alemania compite a escala mundial. “Si se posiciona como contraria a la inmigración, esto no nos hará atractivos para otros países y trabajadores cualificados”, afirmó.
La evolución
En algunos grupos profesionales ya se observa cómo la disminución del número de trabajadores alemanes se compensa con la llegada de extranjeros. Un análisis de la BA para dpa demuestra esto para el periodo de 2018 a 2023 en la industria manufacturera.
El número de alemanes en este sector disminuyó en 285.000, mientras que el número de extranjeros aumentó en 202.000. En la hostelería hay unos 64.000 alemanes menos y 72.000 extranjeros más.
Lo mismo ocurre en el sector de las finanzas y los seguros: el número de alemanes disminuyó en 22.000 personas, mientras que el de extranjeros aumentó en 19.000. Sin embargo, la proporción de extranjeros sigue siendo muy inferior a la media en este sector, con algo menos del seis por ciento.
En otras profesiones, el número de alemanes y extranjeros crece fuertemente, como por ejemplo en la salud, la información y la comunicación así como en el ámbito de la educación y la enseñanza.
El origen de la mano de obra
Según Lange, las personas procedentes de otros países de la UE están representadas sobre todo en la industria manufacturera, el comercio, el transporte y la construcción. Las personas de los países de los que procede un número especialmente elevado de solicitantes de asilo en los últimos años trabajan sobre todo en el comercio, pero también en el transporte y la hostelería, explicó.
“Y la gente de los Balcanes Occidentales trabaja ahora sobre todo en la construcción, porque desde hace unos años está en vigor la normativa de los Balcanes Occidentales, que permite a los trabajadores cualificados trabajar aquí si han encontrado trabajo en Alemania legalmente”, añadió. Esto fue aprovechado sobre todo por las empresas de la construcción.
El nivel de cualificación
Según Lange, a Alemania llegan tanto extranjeros muy cualificados como poco cualificados. En algunos casos, los inmigrantes experimentan un efecto conocido como “downgrading”. A menudo tienen que “empezar como mano de obra no cualificada y, con el tiempo, cambiar a empleos especializados o expertos”, afirmó. Añadió que a los médicos y abogados les resulta especialmente difícil que se les reconozcan sus cualificaciones profesionales.