El Gobierno salvadoreño ha apuntado sobre los avances en proyectos emblemáticos de inversión en los que se ha trabajado en los dos primeros años de gestión. Entre los proyectos más fuertes destaca trabajo ejecutado en el Aeropuerto Internacional Monseñor Romero, al que se le ha apostado en materia de modernización.
“Se cambiaron los radares, se hizo el recarpeteo total de la pista, se modernizó migración, se hizo una sala de despedida, se han ampliado las salas de espera y se está haciendo la ampliación adicional. Cuando los aeropuertos en un país se amplían, se modernizan, se impacta de forma directa en la economía, en la capacidad logística y en el turismo del país.”, acotó esta mañana el Secretario Técnico, Roberto Lorenzana.
Como resultado de estas inversiones el secretario se refirió al reconocimiento hecho por la Organización de Aviación Civil Internacional (OACI), al catalogar al Aeropuerto Internacional de El Salvador como el cuarto más seguro de América, después de Estados Unidos, Canadá y Nicaragua.
En cuanto a proyecciones afirmó que en esta gestión se espera ampliar en un 30% la capacidad del aeropuerto en absorber más personas viajantes.
Por otra parte, también destacó la inversión que el gobierno está realizando a través de FOMILENIO II, en conjunto con AEROMAN en un asocio público-privado. “Estamos haciendo una inversión importante de capacitación en mantenimiento de aviones para 1200 jóvenes técnicos e ingenieros en el área de aeronáutica civil, los cuales serán incorporados al personal de la empresa”, informó.
En materia de obras públicas, señaló como lo más sobresaliente la construcción de la carretera que va de Sonsonate al Puerto de Acajutla, que forma parte del corredor logístico centroamericano y de la Ruta del Pacífico que contribuye al flujo de mercancías a nivel regional.
Sobre la licitación de espectro para servicios móviles, afirmó que “las reformas a la Ley de Telecomunicaciones permitirán avanzar hacia la modernización, no solo las telecomunicaciones del país, sino creará un impacto decisivo en el ambiente económico”.
Lorenzana explicó que el desarrollo de la infraestructura de banda ancha es un elemento esencial para garantizar que las tecnologías de la información y comunicación se utilicen de manera innovadora para la optimización en los servicios de salud, educación, intercambios y comercio, entre otros, a fin de lograr un crecimiento socioeconómico sostenible.