El Departamento de Seguridad Nacional de Estados Unidos calificó las recientes elecciones presidenciales como "las más seguras de la historia" del país norteamericano, contradiciendo las afirmaciones del presidente saliente, Donald Trump, sobre un fraude electoral generalizado y otras irregularidades en la votación.
Las agencias electorales de la nación, junto con casi una docena de funcionarios federales, aseguraron que no se halló evidencia de votos perdidos o modificados en los comicios.
"No hay evidencia de que ningún sistema de votación haya eliminado, modificado o perdido votos. La elección del 3 de noviembre fue la más segura en la historia de EE.UU.", anunciaron las partes a través de un comunicado conjunto.
Asimismo, el documento señala que "en este momento, en todo el país, los funcionarios electorales están revisando y volviendo a comprobar todo el proceso electoral antes de ultimar el resultado".
El anuncio llega poco después de que el presidente estadounidense publicara un tuit en el afirmó que millones de votos fueron borrados y algunos, que eran para él, fueron cambiados a favor del candidato opositor.
"El software electoral, Dominion, borró 2,7 millones de votos de Trump en todo el país. Los estados que usan el sistema de votación de Dominion cambiaron 435.000 votos de Trump a Biden", escribió el mandatario en la red social, en un texto que fue marcado por Twitter con la advertencia de que "esta afirmación sobre el fraude electoral es impugnada".
"Aunque sabemos que hay muchas reclamaciones infundadas y oportunidades de información errónea sobre el proceso de nuestras elecciones, podemos asegurarles que tenemos la máxima confianza en la seguridad e integridad de nuestras elecciones, y ustedes también deberían tenerla", agregaron las agencias.
El comité que publicó el pronunciamiento, que incluye a la Agencia de Seguridad Cibernética y de Infraestructura (CISA, por sus siglas en inglés) y a la Asociación Nacional de Secretarios de Estado, enfatizó que cada boleta tabulada por la máquina también tiene una copia de seguridad en papel, lo que permite corregir errores en caso de que se produzcan.
Finalmente, las partes involucradas en el control de los resultados instaron a la población a dirigirse a los funcionarios electorales cuando tengan dudas, "como voces de confianza mientras administran las elecciones".
Hasta el momento, Trump no ha reconocido su derrota y ha denunciado un presunto "fraude" cometido durante el recuento de votos. De hecho, el sábado aseguró que ganó las presidenciales con "71 millones de votos legales", poco después de que varios medios estadounidenses dieran la victoria a Biden.