El zancudo Aedes Aegypti, con apenas unos milímetros de tamaño, blanquinegro con rayas en el dorso y en las patas, se ha convertido en una amenaza latente para la población de El Salvador y para al menos 22 países más del continente americano por ser el transmisor del zika, virus asociado al Síndrome de Guillain Barré y a los nacimiento con microcefalia de hijos de madres que padecieron la enfermedad.
Juan Carlos García es uno de los miles de salvadoreños afectados por el zika y relata que primero sintió fuertes dolores de cabeza, fiebres y los ojos se le pusieron rojos; luego le aparecieron puntos rojos en la piel y el dolor en las articulaciones. Durante seis días sufrió los síntomas con mayor intensidad.
El joven de 20 años asegura que su reacción al ser diagnosticado con el virus no fue de alarma, sino hasta que le dijeron que al no recibir un buen tratamiento podría ser víctima del Guillain Barré, “podría quedar parapléjico eso sí me afligió”, dijo.
El Guillain Barré es un trastorno neurológico que tiene un origen autoinmunitario que causa debilidad, pérdida de reflejos, entumecimiento, dolor y visión borrosa, entre otros síntomas que podrían llevar a la muerte.
“La verdad es que al final es preocupante que un zancudo siendo tan pequeño sea también tan peligroso”, dijo García y trajo a cuenta la importancia de la eliminación del zancudo transmisor no solo del zika, sino también del chikungunya y el dengue.
“Es más que toda una cuestión cultura y de solidaridad (para eliminarlos), muchos piensan que no les puede llegar y no buscan eliminarlos. Pero hasta que no le sucede a uno no se pone a pensar cómo puede hacer para evitar que le pase al vecino”, señaló y llamó a la población en general a colaborar adoptando “una cultura de limpieza” en las zonas donde habitan.
Con el afán de evitar la proliferación del virus, el gobierno salvadoreño ha brindado recomendaciones para la eliminación del zancudo y el viceministro de Salud, Eduardo Espinoza destacó que están “llevando a cabo una intensa campaña de concientización, educativa, de fumigación, de destrucción de los criaderos de zancudos. Esto es a lo que hemos apostado y esto es lo que se debe hacer a fin que la población no se vea gravemente afectada”.
El Ministerio de Salud, en sintonía con las recomendaciones de la Organización Panamericana de la Salud (OPS), también ha hecho un llamado a la población en general para que en sus casas y comunidades eliminen cualquier criadero de zancudos y también tome las medidas necesarias para evitar la picadura del insecto.
La importancia de eliminar cualquier lugar idóneo para la proliferación del zancudo es porque la hembra siempre busca depositar sus huevos en recipientes que contengan agua limpia.
Entre las recomendaciones están: revisar la casa y las zonas de los alrededores como jardines en búsqueda de recipientes que puedan acumular agua estancada y que no tenga ninguna utilidad y descartarlos o guardarlos bajo techo o cubiertos. Asimismo mantener tapados los tanques y recipientes en los que colectan agua. Asimismo Implementar el uso de insecticidas domésticos, mosquiteros y repelentes, entre otras medidas.
