En matemática, el t0 se refiere al punto cero, al punto de comienzo del tiempo dentro de un sistema. t0 en química es el punto donde comienza un experimento. Si el experimento no se planea correctamente, estará destinado a fracasar. Es por eso que el Tiempo Cero es esencial, pero también es crucial el Tiempo después ya que es ahí donde se sabe si el experimento ha funcionado o no.
Mientras releo mis crónicas de estos once meses después de haber regresado a El Salvador me doy cuenta que el país ha sido un experimento donde el t0 ha existido como punto inicial de algún experimento pero hasta ahí. Parece como si viviéramos en alguna malvada película de ciencia ficción donde hay un ser que manipula a los demás sin importarles su bienestar. Si esa película fuera El Salvador, le pondríamos nombres a esos seres malévolos: Funes, Saca, Flores… quienes comenzaron proyectos con gran algarabía y grandes rótulos para después abandonarlos como una mala escena fílmica.
Como país del “para mientras” o “a ver qué sale” se hacen proyectos de carreteras donde el experimento es solo para salir del asunto o para que la gente vea que se hace algo. Me pongo a pensar en esas carreteras que siguen la corriente natural del río y me pregunto por qué no se hace algo distinto para salir del subdesarrollo. Eso a nivel macro, a nivel de país, pero también ese sentimiento lo trasladamos a nuestras vidas propias: se siguen patrones que hemos tenido por toda la vida por costumbre o tradición y esperamos que nos vaya mejor.
Repetimos a la saciedad que Einstein dijo “Locura es hacer lo mismo una y otra vez esperando obtener resultados diferentes”, o que Gabriela Mistral le puso el Pulgarcito a El Salvador y hasta que Martínez le cortó las manos a sus hijos, todo esto sin tener pruebas que haya sido así.
Multitudes van a las clínicas y lo primero que le recetan es Amoxicilina y la gente cree que será lo que le quitará el dolor. O cuando el paciente con dolor de muela va al dentista y le rellenan la muela mala y la buena sin antes tener rayos x o toda la información relevante para hacer un diagnóstico medianamente inteligente. O mi amiga quien hasta la fecha le teme a las inyecciones después que una mala praxis de chiquita la dejara patoja por meses.
Es necesario que nos despojemos de la mentira, de las fake news, de las tradiciones estériles que no nos dejan destacar como sociedad. Dejemos que los ríos fluyan su cauce y apostémosle a los puentes y a las calles subterráneas, a las notificaciones electrónicas y no a las firmas del “venga hasta el lunes”, planeemos reuniones cuando el tráfico haya mermado, emplacemos el almuerzo cuando tengamos hambre y que no nos dicten que tiene que ser de 12 a 1. En fin, si comenzamos a hacer las cosas distintas, si comenzamos a hacer del t0 un experimento planeado correctamente y verificado, será entonces que comenzaremos a vislumbrar un mejor futuro para nosotros, para nuestra casa, para nuestra colonia, para nuestra sociedad y quizás seamos un experimento a imitar por otros.
