El 28 de noviembre pasado en la entrevista matutina de canal 33, Republica, mientras analizábamos el informe de gobierno rendido por el presidente Salvador Sánchez Cerén acusaba al nepotismo de izquierda de ser una de las causas de la caída en las encuestas del FMLN para las presidenciales de 2019 (minutos 37:13 al 38:40).
https://www.youtube.com/watch?v=L7Sm7ToNQzQ&t=2309s
La mañana siguiente haciendo uso de respuesta el ex canciller Hugo Martínez realizó una llamada telefónica al mismo programa donde expresaba tres cosas puntuales: que sus dos hijos ninguno había o está estudiando becado en Taiwán o China Popular o en el extranjero. Pedía que aclarara mis fuentes y que me disculpara públicamente de mis aseveraciones (Minutos 09:54 a 12:10).
https://www.youtube.com/watch?v=G202Zkbcdv0&list=PLmhqgGRdYNhJHVe51jrhxpLkNpENAS9JF
Efectivamente, ninguno de sus hijos había o está becado en Taiwán como dije, o en China Popular como remarcó Roberto Cañas en dicha entrevista.
¿Mi fuente? durante una conversación sostenida hace ocho años con el hijo del ex canciller, me manifestaba que viajaría a la Argentina a estudiar. Mi memoria por el tiempo transcurrido de aquella platica me traicionó en cuanto al país donde el hijo del recién nombrado, para entonces canciller, estudiaría cinematografía.
De aquel encuentro deduje que era una beca porque para entonces la embajada argentina ofrecía previa presentación de un proyecto esa posibilidad de estudios a cineastas del país. Oficialmente las becas las gestiona RREE.
Por eso, está claro y reconozco que dije datos inexactos en cuanto al tema en cuestión. Comprendo los sentimientos de rabia y decepción que provoqué.
II
¿Por qué aludir a ese ejemplo, como nepotismo, cuando pudieron esos estudios haber ocurrido con fondos familiares? Por cuatro razones importantes:
Se debe en base al trato justo cuestionar a todos los candidatos a la presidencia y no solo a uno de ellos como se viene haciendo desde la mayoría de analistas y medios.
Porque durante la pasada administración la FGR ha establecido que Francisco Cáceres, secretario privado de Mauricio Funes transfirió dinero de los gastos operativos de presidencia para el pago de estudios de una amiga que residía en Madrid, España.
La ex ministra de salud, colega en el gabinete con Hugo Martínez reconoció que al menos ella recibió sobre sueldos durante la presidencia Funes. Estas cantidades de dinero (no declaradas a Hacienda) podrían permitir sufragar gastos extras de los ministros que su salario no puede costearles.
De igual está en curso una investigación de una casa de estudios sobre las dos gestiones de Hugo Martínez al frente de RREE tanto en el gobierno Funes como con Sánchez Cerén. Dicho informe que se elabora está motivado en las declaraciones del ex canciller sobre, que, sus gestiones al frente de ese ministerio han sido transparentes:
En su momento, entiendo, la universidad que elabora dicho dosier lo presentará y Probidad de CSJ escrutará sus gestiones. Previo aquella entrevista tuve la oportunidad de leer posibles casos que apuntarían a una forma de privilegiar la familiaridad en nombramientos para cargos tanto en servicio exterior como servidores públicos locales:
Nuestra embajadora en Washington es hija del ministro de educación.
Ex miembros de Nuevas Ideas que ahora apoyan al FMLN han sido nombrados en el servicio exterior en Washington.
Una hija de Lorena Peña es consejera en nuestra embajada en Washington y su hijo igualmente es consejero en Canadá y, al menos, una sobrina trabajaría como asesora en el MINTRAB.
Un hijo de la vice ministra para salvadoreños en el exterior trabaja en el consulado de Texas.
Igualmente la sobrina del fallecido Secretario Técnico de la Presidencia, era cónsul en Milán y en la actualidad es Karla Martínez Herrera.
La diputada efemelenista de San Miguel, su esposo ex diputado, ahora es jefe del VMT. Igual los hermanos Quintanilla, uno sindico de la municipalidad y el otro hasta este año fue diputado. El gobernador cesado en junio, su esposa, continúa siendo la directora del hospital local.
El sindicato de MICULTURA en su oportunidad ha denunciado al menos 36 plazas que fueron otorgadas desde 2009 a familiares de la patronal e igual el hijo de la diputada Nidia Díaz está a cargo del proyecto ISAR en dicho ministerio. Otros casos investigados incluyen familiares del presidente de la república.
La intencionalidad en la entrevista del 28 de noviembre no era mentir sobre el ex canciller o decir cosas sin contrastar. Fue indignación ante lo que se suponía no sucedería en un gobierno de izquierda. Los niveles de nepotismo impensables durante sus años de oposición armada y luego política fueron el leitmotiv que trajo a colación la inexactitud de datos sobre los estudios en el extranjero de uno de los hijos de Hugo Martínez.
Pero esa fe de errata televisiva mía no lo exime –por ejemplo- de la omisión de no haber anulado el pasaporte diplomático entregado sin su aval a Ada Guzmán por la cancillería que él dirigía o, en todo caso haber dado aviso a FGR de la falsedad ideológica cometida en su institución.
Corolario:
Pueden estar o no de acuerdo con mi explicación. Pero no podrán negar que nadie hasta ahora ha rectificado sobre la guerra sucia (calumnias e injurias) iniciada contra Nayib Bukele y su movimiento. Y no lo harán. No creo que mentir sea eficaz pero nuestra clase política (como reflejan los ataques en redes sociales) ha pervertido el principio de inocencia debido a una larga cadena de actos de corrupción en 30 años.
Vivimos un ambiente enrarecido en esta campaña debido a que una candidatura presagia desaparecer el bipartidismo. Han sido ARENA/FMLN al bloquear y difamar impunemente la candidatura de Nayib Bukele quienes han instalado que las emociones sean más influyentes que los hechos y que las creencias personales terminen definiendo no solo el análisis sino el voto.
Frente a un bipartidismo que ha preferido entregar $350,000 a las pandillas antes que sentarse ellos a resolver el problema. Que aprueba el decreto 127, exonerando impuestos a grandes empresas, mis análisis no son un atentado contra la dignidad, honorabilidad e integridad de un candidato, atentado si es, al derecho a pensar del ciudadano, ocultar o disimular las fallas éticas de los políticos. Ponerlas sobre la mesa no es delito.
Nota del Editor: Los hijos de Lorena Peña ya no trabajan para el gobierno, en el servicio exterior, desde marzo del presente año.