En un hecho que muchos artistas y gestores culturales consideran un avance en materia cultural, el 11 de agosto luego de tres años de presentarse el anteproyecto de ley, la Asamblea Legislativa aprobó la Ley de Cultura en El Salvador con 73 votos a favor.
La ley contiene 109 artículos que tienen como base la Gestión Estatal del Arte y la Cultura, Patrimonio Cultural, Derechos Culturales, Pueblos Originarios, La Educación Artística, la Libertad de creación cultural, Empresas Culturales Nacionales y el fomento por el Estado y la Protección Social de los Trabajadores de la Cultura y el Arte y el Fondo Nacional Concursable para la Cultura y las Artes (FONCCA).
Silvia Elena Regalado, Secretaria de Cultura, afirmó que la aprobación es un gran logró y un hito pues es la primera vez que El Salvador contará con una Ley de Cultura. Entre lo más destacado según la funcionaria está “la diversidad cultural que contempla la ley ya que no podría existir un ente regulador de la cultura sin las leyes ancestrales”.
La Ley de Cultura brindará a los artistas, poetas, escritores, pintores y demás gestores su identificación como tal, es decir, contarán con un registro y podrán ser reconocidos por su profesión.
Por otra parte, como una herramienta para la transformación social y artística en el marco del plan de seguridad pública “El Salvador Seguro”, el Gobierno junto a la Secretaría de Cultura impulsaron el teatro infantil con la creación del grupo escénico “La Colmenita”.
Alrededor de 140 infantes integran el programa para el fomento de las artes escénicas, cada uno de ellos son parte de uno de los nueve municipios priorizados por el plan de seguridad, entre ellos: San Salvador, Santa Ana, Soyapango, Mejicanos, Ciudad Delgado, Zacatecoluca, Jiquilisco, San Juan Opico y San Miguel y suman los esfuerzos de adolescentes de Dulce Nombre de María, Chalatenango, Chapeltique y el caserío El Mozote.
Para Cesar Pineda, director de las Casas de la Cultura para el Desarrollo de la Convivencia y del Buen Vivir, esta labor va más allá que el desarrollo de una aptitud artística en los niños y niñas.
“La Colmenita es escuela de formación humana de desarrollo de principios básicos de la humanidad como tal, por lo tanto, se convierten en espacios de convivencia y de desarrollo de principios como la solidaridad, verdad, equidad, hermandad”, acotó Pineda.
En el desarrollo de su segunda fase en este 2016, La Colmenita presentó su primer montaje a través de la obra “La cucarachita Martina pide la convivencia y la paz”.
La obra abrió las puertas para el desarrollo del primer Festival Nacional de Teatro Infantil (FESTI); alrededor de 500 niños provenientes de diversas Colmenitas del país fueron partícipes del montaje de 10 obras.
Salvador Sánchez Cerén, expresó que el festival teatral creó "el germen de una nueva cultura, la cultura transformadora del pueblo, la cual, es la principal protagonista en la creación de generaciones de salvadoreños y salvadoreñas más críticos de su realidad, más conscientes del sentido de la vida y respeto a sus semejantes”
Además, otro de los avances en materia cultural fue la creación de las caravanas artísticas “Actívate”, las cuales en su primera fase tuvieron como objetivo acercar la cultura y las artes a la población.
Según Secultura alrededor de 5,000 personas fueron partícipes de las actividades en las que destacan la realización de trabajos de pintura, danza, teatro y música.
“Dentro de los factores de desarrollo que tienen las sociedades el arte es de los elementos más revolucionarios que nos lleva a pensar, sentir, interpretar y desarrollar lo mejor de nosotros y nosotras mismas”¦ es importante pensar en el desarrollo de las comunidades, no solo en términos de la economía, sino también de la cultura”, expresó Silvia Elena Regalado, secretaría de Secultura.
Por otro lado, el trabajo de las Casas de la Cultura de la Convivencia como puntos de encuentro para las comunidades se solidificó con el primer Encuentro Nacional de Casas de la Cultura “Por los derechos Culturales, el Pueblo es Cultura”.