La Fundación Mauricio Aquino informó este martes que los representantes del Congreso de Estados Unidos, Jim McGovern y Norma Torres, han solicitado que se cree una comisión nacional de investigación de los más de 10.000 desaparecidos que dejó la guerra civil que afectó a El Salvador de 1980 a 1992.
De igual forma los Congresistas solicitan la desclasificación de los documentos relacionados a las desapariciones, la petición la han realizado por medio de cartas dirigidas a los presidentes Barack Obama y Salvador Sánchez Cerén, de Estados Unidos y El Salvador, respectivamente.
En la carta dirigida a Obama, los Congresistas le piden que dirija una orden para desclasificar archivos de inteligencia e informes que no han sido publicadas anteriormente y que se relacionan con casos no resueltos de desapariciones y violaciones de los derechos humanos durante el período de la guerra civil en El Salvador.
La petición la amparan en la acción realizada en marzo pasado por Obama cuando anunció la desclasificación de archivos de la dictadura argentina en 1976.
“Su reciente decisión de ordenar la desclasificación de los expedientes relacionados con la guerra sucia en Argentina fue un paso importante y positivo que ayudará a descubrir la verdad sobre lo ocurrido en ese país durante el conflicto. Demuestra que entiende el dolor y sufrimiento de las familias que han buscado durante mucho tiempo para obtener información acerca de lo que ocurrió a sus seres queridos que desaparecieron hace décadas”, cita la carta dirigida al presidente estadounidense.
En la en la información enviada a ContraPunto por la Fundación Mauricio Aquino señalan que hasta la fecha ni una sola investigación ha tenido lugar, por lo que aseguran que la comisión y desclasificación de documentos permitirá que las familias sepan la verdad y puedan enterrar a sus seres queridos.
Mientras que en la carta dirigida a Salvador Sánchez Cerén le señalan que “el establecimiento de una comisión para investigar y resolver los casos de los desaparecidos sería un paso importante y positivo en el alivio del sufrimiento de tantas personas familias y comunidades salvadoreñas, y para la sociedad salvadoreña en su conjunto. También creemos que sería avanzar en sus propias prioridades para promover la reconciliación, fortalecer la justicia y el Estado de ley y consolidar la paz en El Salvador”.
Según la Fundación, la acción de los dos congresistas es en respuesta a a una solicitud que hicieron durante la reciente delegación a Washington. Las cartas deben estar firmadas por otros miembros del Congreso a más tardar el 15 de julio.