Autoridades panameñas y representantes de diversos países inauguraron el pasado domingo la ampliación del Canal de Panamá, infraestructura considerada la obra de ingeniería civil más grande del siglo XXI.
El vicepresidente, Oscar Ortiz, estuvo presente en la inauguración de la histórica ampliación del Canal de Panamá, acto significativo para Panamá y América Latina por tratarse de la obra de infraestructura más importante para dicho país en los últimos 100 años.
Con el arribo a la esclusa Santa Clara del buque chino Cosco Shipping Panamá se celebró una nueva era para la infraestructura que opera en el istmo desde el 15 de agosto de 1914. El canal de Panamá, fue construido y es administrado por los panameños y al servicio del comercio marítimo mundial.
La ampliación de la infraestructura canalera permitirá el tránsito de buques de gran calado, siendo un importante atractivo para nuevas inversiones en desarrollo logístico y portuario, que impactarán en la economía regional, especialmente con la atracción de inversionistas asiáticos, pues la ampliación disminuirá los costos de tránsito para los buques.
Previo al acto de inauguración, el Vicepresidente Oscar Ortiz se reunió con la presidenta de la República de China (Taiwán), Tsai Ing-wen, con el objetivo de fortalecer los lazos de amistad, comercio y cooperación entre ambos países.
Los funcionarios compartieron el interés por seguir fortaleciendo las relaciones comerciales y de cooperación entre ambos pueblos, sobre todo con proyectos que beneficien a los jóvenes salvadoreños.
Es de recordar que el Vicepresidente Ortiz, realizó una visita oficial por Taiwán en septiembre de 2015, donde se reunió con el entonces Presidente taiwanés Ma Ying ““Jeou, y desarrolló una amplia agenda que incluyó un foro con inversionistas de la isla, así como la visita a diversas empresas taiwanesas, con el objetivo de promocionar a El Salvador como un destino para invertir.
Esto desencadenó posteriormente una serie de visitas de inversionistas taiwaneses al país para explorar oportunidades de inversión.
Con una inversión de aproximada de 5.580 millones de dólares, el consorcio de empresas, liderado por la organización española Sacyr, logró culminarla después de siete años de construcción, donde se incluyeron retrasos de año y medio, que incluyeron disputas laborales y reclamos por sobre costos y fisuras que se detectaron en sus estructuras.