El fenómeno de la migración siempre ha existido en el país y está influenciado por varios factores de carácter social, económico, político y personal, entre otros.
Para el asesor en tema migratorio Reynaldo Alvergue, no deja de preocupar las nuevas normas impuestas por el gobierno de Estados Unidos en materia de asilo. ya que limitan el acceso a ese derecho a las miles de personas que buscan el “sueño americano”.
El especialista manifestó que “aproximadamente 250 a 500 personas a diario se dirigen hacia Estados Unidos”.
No obstante, el presidente estadounidense Donald Trump, aunque conoce bien el teje y maneje de este problema, hay factores que pueden no estar a su favor. Por ejemplo, dijo Alvergue, es el cambio que ha habido en el Congreso, es muy significativo, porque de los 437 congresistas, más del 50% son mujeres; y eso nunca había pasado en el país del norte, a la par que estos funcionarios son de diferentes nacionalidades, pese a que todos son ciudadanos de Estados Unidos.
“Trump va a navegar fuerte contra la corriente porque estos congresistas lo están acusando del mal manejo que ha hecho sobre la migración y porque lo consideran racista”.
También tiene otro punto en contra, y es que mucha gente que lo apoyó en las elecciones presidenciales en 2017 se han decantado y hoy no lo respaldan por su forma de gobernar. (Trump termina su mandato el 20 de enero de 2021). En noviembre del próximo año son las elecciones.
Alvergue opina que El Salvador es el único país del Triángulo Norte que está tratando el problema de la migración; incluso el presidente Nayib Bukele ha pedido un trato preferencial para los salvadoreños precisamente porque está haciendo esfuerzos para evitar que connacionales se emigren a ese país, contrario a lo que ocurre con Guatemala y Honduras.
Además, esta administración va a trabajar por la ampliación del TPS (Estatus de Protección Temporal, por sus siglas en español) que vence en enero de 2020 y al que están amparados más de 200 mil salvadoreños.
“Si logra conseguir que se extienda ese beneficio, sería un buen logro”, enfatizó Alvergue.
Y sobre este punto, cabe mencionar la gestión que está haciendo la ministra de Relaciones Exteriores, Alexandra Hill Tinoco en Washigton D.C., quien desde hace dos días ha mantenido importantes acuerdos con funcionarios y representantes de la sociedad civil en Estados Unidos, para impulsar iniciativas migratorias. en el área de la seguridad y desarrollo económico.
La titular de Cancillería ya tuvo reuniones con los equipos de trabajo de los miembros del Senado, a quienes les explicó el nuevo enfoque de la política exterior del presidente Bukele, así como la búsqueda de inversión y el desarrollo nacional.
“Reconocemos que la ayuda es importante, pero buscamos inversión y posicionar a El Salvador ante el mundo como un lugar apropiado para invertir”, recalcó Hill Tinoco.
La funcionaria de igual manera ha conversado con el vicepresidente de la Corporación para Inversiones Privadas en el Extranjero (OPIC, por sus siglas en inglés), Ryan Brennan, con el director para Asuntos del Hemisferio Occidental del Consejo Nacional de Seguridad de la presidencia de Estados Unidos y Mauricio Claver Carone, entre otros.
El FMLN a través de un comunicado, expresó su preocupación ante la crisis humanitaria que enfrentan las personas migrantes, como consecuencia de la “inhumana política migratoria implementada por el gobierno del presidente Donald Trump”.
Durante la presidencia del efemelenista Salvador Sánchez Cerén, hubo éxodos de personas a partir de octubre, con el fin de ingresar a Estados Unidos ilegalmente para mejorar sus condiciones de vida.
Fueron tres caravanas de salvadoreños y también de hondureños que partieron hacia el norte empujados por la pobreza y la delincuencia.