Tres congresistas estadounidenses han dado positivo por coronavirus tras verse envueltos el 6 de enero en el caos en que se convirtió el Capitolio por el asalto de cientos de seguidores del presidente, Donald Trump, lo que hace temer que surjan nuevos contagios.
Al caso de Bonnie Watson Coleman, que representa al Partido Demócrata en la Cámara de Representantes, se han sumado este martes los de sus compañeros Pramila Jayapal y Brad Schneider, confirmados durante la jornada.
Schneider, que no presenta síntomas, ha lamentado en un comunicado que "varios legisladores republicanos en la sala se negasen a llevar mascarilla", a pesar de que se les pidió "de forma educada" que se la pusieran.
"Ahora estoy en estricto aislamiento, preocupado porque he puesto en riesgo la salud de mi mujer y enfadado por el egoísmo y la arrogancia de los antimascarillas", ha lamentado, según la cadena NBC.
También Jayapal ha planteado una crítica similar, lamentando que "demasiados republicanos se han negado a tomarse la pandemia y el virus en serio", lo que implica "poner en peligro a todos los que le rodean". En este sentido, ha afirmado que unos simples gestos pueden haber convertido "un ataque de terrorismo doméstico" en escenario masivo de contagios.