La Superintendencia de Competencia (SC) destacó su trabajo en la protección y garantía de la competencia a nivel empresarial a través de la regulación de concentraciones económicas en el país. La institución hace énfasis en la importancia de la defensa de la legalidad de la adecuada expansión o consolidación de negocios.
El superintendente de Competencia, Nelson Guzmán, explica que en promedio “han habido siete solicitudes de concentraciones económicas por año, desde que se inició la implementación de la ley de competencia”.
De acuerdo con declaraciones de Guzmán, los últimos casos que se han emitido de concentraciones económicas son en los sectores de electricidad y telecomunicaciones. Sin embargo, la mayoría de solicitudes provienen del sector de las cervezas y del sector financiero.
Entre junio de 2017 y mayo de 2018, la SC recibió 15 solicitudes de autorización de concentración económica. De estas, ocho fueron declaradas improcedentes, tres inadmisibles, tres fueron autorizadas y una condicionada.
Uno de los casos emblemáticos de la institución en 2016 fue el condicionamiento de la concentración económica entre AB InBev y SABMiller. La SC resolvió que, para que la concentración se llevara a cabo, se debía realizar un proceso de desinversión de las marcas Regia Extra y Suprema, las cuales fueron adquiridas posteriormente por la sociedad de capital salvadoreño-guatemalteco Cervecería Salvadoreña.