La espiral de criminalidad que aqueja al país sigue cobrando la vida de policías y militares, mediante emboscadas, presuntos pandilleros asesinaron a un agente policial en el departamento de San Vicente y a un soldado en La Unión, confirmó este lunes el ministro de Seguridad, Mauricio Ramírez Landaverde.
Los hechos fueron cometidos el pasado 28 de agosto. El policía identificado como: Anselmo Vásquez Mendoza fue atacado por dos sujetos al interior de su vivienda ubicada en San Vicente, cantón dos quebradas, colonia Las Brisas. De acuerdo a información oficial, Vásquez estaba destacado en la Unidad de la Mujer (UNIMUJER) del departamento de Cuscatlán.
El asesinato del agente representa la baja número 28 que registra en lo que va de 2016 la Policía Nacional Civil (PNC), afirmó el ministro. En 2015 fueron asesinados 64 policías, la mayoría mientras estaba de licencia.
En otro hecho, un inspector y dos agentes de la PNC resultaron heridos de bala luego de enfrentarse con pandilleros en el cantón Veracruz, municipio de San Rafael Cedros del departamento de Cuscatlán.
Hasta el cierre de esta nota, la PNC aseguró que los tres agentes se encuentran “estables y en observación médica”. De enero hasta el 27 de agosto del presente año, la Policía reporta un total de 403 intercambios de disparos con pandilleros, producto de ellos han muerto 376 delincuentes.
Asimismo el militar, José Alfredo Fuentes Molina fue atacado con armas de fuego por presuntos miembros de la pandilla 18 en la colonia Galilea, departamento de La Unión. Según información policial, Molina había sido amenazado anteriormente por dicha estructura criminal.
“Los ataque son una reacción violenta la trabajo que la institución está llevando a cabo. Estos nos une más y nos fortalece a pesar de que está significando mucho trabajo operativo y que está representando la pérdida de compañeros, esto significa una dura lucha”, dijo Ramírez Landaverde.
El ministro aseguró que mientras los pandilleros sigan teniendo la actitud de atacar a policías, la PNC estará obligada a perseguirlos y capturarlos.
“En la medida que estos grupos se resistan usando armas de fuego para repeler el trabajo de la institución, seguirán habiendo enfrentamientos. La PNC está en la obligación de perseguir a estos sujetos, sin embargo hay unos que se resisten”, acotó el funcionario.
En El Salvador, de acuerdo a fuentes oficiales existen más de 30 mil pandilleros dispersos en diferentes puntos del país, con énfasis en zonas rurales; 13 mil más están cumpliendo penas en diferentes centros penales.
