El 18 de julio, El Salvador fue sacudido por un sismo de magnitud 6.8 frente a la costa del departamento de Usulután. Desde el momento del sismo principal, a las 6:22 p.m., hasta las 10:00 a. m. del día siguiente, se registraron un total de 121 réplicas, 34 de las cuales fueron sentidas por la población, con magnitudes que oscilaban entre 3.5 y 5.4 en la escala de Richter.
El Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales (MARN) informó que el sismo principal tuvo una profundidad de 51.5 kilómetros y una intensidad de V-VI en la escala Mercalli Modificada en Usulután, a 66 km al sur de la playa El Espino. La Red Sísmica Nacional de El Salvador registró 18 sismos entre las 6:22 p.m. y las 8:15 p.m. del 18 de julio de 2023.
Las características de las señales registradas indican que el origen de esta actividad sísmica se debe al proceso de subducción de las placas tectónicas Cocos y su Caribe. A pesar de la magnitud del sismo, no representó una amenaza de tsunami para El Salvador.
Daños
Las afectaciones reportadas incluyen caída de repellos en casas de habitación en Usulután grietas en el piso y paredes del hospital San Juan de Dios en San Miguel, y desprendimiento de rocas en varias carreteras.
En respuesta a la emergencia, personal de la Fuerza Armada de El Salvador se movilizó para realizar la remoción de escombros en una vivienda ubicada en el cantón La Concordia, Jiquilisco, Usulután. Un habitante de la vivienda resultó con un golpe leve en un pie y fue trasladado al Hospital Nacional de Jiquilisco para recibir atención médica.
El MARN informó que continuará monitoreando esta actividad sísmica para informar a la población sobre la evolución de este fenómeno. Por otro lado, recomendó a la población atender las indicaciones emitidas por las autoridades de Protección Civil y no prestar atención a rumores o a información no oficial acerca de la situación.