Los mineros artesanales, mejor conocidos como gí¼iriseros, intentan negociar con los candidatos y actuales diputados de los partidos políticos de la derecha salvadoreña y con la iglesia católica misma, para reformar o derogar el artículo 2 de la Ley de Prohibición de la Minería Metálica para que les permitiría continuar trabajando en la mina San Sebastián, en Santa Rosa de Lima, en La Unión.
Al respecto, en la conferencia de prensa dominical el arzobispo de San Salvador, José Luis Escobar Alas admitió que los mineros artesanales lo han buscado para cabildear la reforma de dicha ley. Sin embargo, el jerarca católico confeso que no está dispuesto a negociar tal asunto.
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“Supe que querían hablar conmigo, pero yo no estaba en ese momento y que estaban dialogando con Tutela Legal (del arzobispado). Estamos para apoyarles, no en el sentido de revertir la ley o modificar el artículo segundo para permitir la explotación minera; eso sería una traición al pueblo y, sobre todo, volver a condenar al pueblo al sufrimiento, a la pérdida de su salud, a la muerte. Se hizo justicia aprobando la ley. Vamos a abogar por que no sea vulnerada”, manifestó el líder religioso.
De igual forma, organizaciones ambientalistas y sociales respaldan la posición de la iglesia católica de rechazar la reforma a la ley contra la minería, porque de hacerlo sería un riesgo y una oportunidad para que las compañías transnacionales mineras puedan invertir de forma directa o a través de intermediarios para explotar la mina, argumentó Bernardo Belloso, presidente de la Asociación para el Desarrollo de El Salvador (CRIPDES).
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“Compartimos la posición de la posición de la iglesia católica, que es sumamente difícil la reforma o derogatoria de la ley contra la minería metálica, dado que este proceso abriría las puertas a las empresas mineras nuevamente para que entren a El Salvador. Consideramos que es un momento oportuno para que las organizaciones y la iglesia misma exijan al gobierno y a la Asamblea Legislativa que ejecuten proyectos para solventar las demandas de las comunidades de San Sebastián”, agregó Belloso.
Las organizaciones ambientalistas y sociales salvadoreñas advierten que los mineros artesanales están haciendo cabildeo con los candidatos a diputados de los partidos políticos de la derecha para que se comprometan en caso de ser electos deroguen o reformen la ley contra la minería, y de acuerdo a las tendencias electorales, se presume que los partidos derecha pueden ganar más escaños en la Asamblea Legislativa, cambiando la aritmética en las votaciones y esta ley, como muchas otras posibles legislaciones ambientales, corren el riesgo de ser eliminadas o ignoradas por mucho tiempo más, como ha sucedido en el pasado.
