Los diputados de la Asamblea Legislativa aprobaron la extensión de medidas de excepción debido a la emergencia mundial desatada por la propagación mundial del COVID-19.
Las diferentes fracciones legislativas decidieron reunirse para valorar dicho dictamen que agregaría 15 días más en la suspensión de libertad de circulación, libertad de asociación y la libertad de no cambiar de domicilio.
Esta ley dotó de herramientas legales al Ejecutivo para detener a aquellas personas que no acataran la disposición de la cuarentena domiciliar decretada por el Ministerio de Salud ante la emergencia.
Sin embargo, esta prórroga fue modificada respecto al primer decreto que vence el 29 de marzo, por lo cual la PNC no podrá llevar a las delegaciones a los detenidos, sino a sus hogares, apegado a la sentencia dada por la Sala de lo Constitucional de la Corte Suprema de Justicia. Estas disposiciones, de ser aprobadas, vencerán el 13 de abril.
Sobre ese punto, algunos diputados ya han dado sus opiniones y han dicho que si bien es cierto la cuarentena domiciliar aún continuaría porque esa es una disposición del Ejecutivo por medio de del Ministerio de Salud, lo que ya no se podría hacer es detener a las personas que circulen sin justificación y llevarlas a centros de cuarentena.
Al respecto, la Sala de lo Constitucional de la Corte Suprema de Justicia emitió una sentencia en el sentido que la PNC no puede tener en delegaciones a las personas que detenga, deberá llevarlas a la vivienda de la persona ya que las delegaciones no cumplen con las condiciones sanitarias necesarias.
Por su parte, el presidente de la Asamblea, Mario Ponce, explicó que el nuevo decreto contiene la disposición de la Sala que aceptó en las últimas dos semanas algunas demandas de ciudadanos que fueron detenidos por la PNC por no cumplir la orden de permanecer en casa, y que fueron llevados a bartolinas o a puestos policiales.
