domingo, 14 abril 2024
spot_img
spot_img

Pensamiento

¡Sigue nuestras redes sociales!

"La propaganda masiva ha persistido durante generaciones, ahora socava valores morales, religiosos, culturales para someternos al mundo liberal global, sometimiento a una autoridad mundial que decidirá nuestros destinos": Ernesto Panamá

spot_img

Por Ernesto Panamá


Cada persona forma su pensamiento, y esto resulta de la información recibida como propaganda de la prensa tradicional, y por medios escogidos por la persona para informarse.

Esto funcionaría bien si no hubiese intereses que controlan medios de difusión quienes pagan por desarrollar campañas publicitarias estimulándote a pensar y a actuar de cierta forma. Ejemplo de esto fue la propaganda que, en El Salvador, a partir del triunfo de la revolución cubana nos mandó elegir a militares para gobernarnos.

El pueblo al comprobar sus malos gobiernos, no votaron por ellos. Pero envalentonados pues ocupaban sus cargos cumpliendo órdenes de la Casablanca, reprimieron y exiliaron a políticos electos por el pueblo, desprestigiando el sistema democrático, haciendo crecer el descontento ciudadano.

En el ámbito geopolítico aún hay personas que no diferencian entre la Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas, y la Federación Rusa, ignorando la historia y sacrificios de esos pueblos para desligarse del pasado régimen.

Además, debemos tener claro que los intereses unipolares dominantes en el siglo XX no han desaparecido, en el siglo XXI la banca mundial y los fabricantes de armas aumentaron la deuda de gobiernos occidentales quienes obedecen sus órdenes. Su lógica es entonces: ¿Controlo gobiernos poderosos, puedo someter a los más débiles?

Para ello debo endeudarlos, derrocarlos o sancionarlos si no se someten, financiar guerras y terrorismo.

Este mundo es el que he vivido por 72 años.

La propaganda nos vendió por el cine a vaqueros siempre triunfadores, acabando con indios o criminales. Vic Morrow actor de la serie de TV Combate, nos vendió la imagen de un ejército triunfador en la segunda guerra mundial y no faltaron las películas de Vietnam en las que los norteamericanos, también eran ganadores.

Los vaqueros ganadores, ocultaron las masacres, el sometimiento y despojo de tierras a los pueblos originales. La serie Combate fue la manera de ocultar la valentía, coraje de las tropas rusas y los millones de hombres y mujeres sin cuyo sacrificio los nazis no hubiesen sido derrotados. Las películas de victorias en Vietnam pretendieron ocultar las atrocidades del ejército norteamericano, que a pesar de su superioridad fue derrotado por fuerzas irregulares.

La propaganda masiva ha persistido durante generaciones, ahora socava valores morales, religiosos, culturales para someternos al mundo liberal global, sometimiento a una autoridad mundial que decidirá nuestros destinos. Su propaganda es la única que debes escuchar y aceptarla como verdad. A este globalismo liberal debes someterte, tú no tienes derecho a disentir, permitirlo puede hacerles perder su supremacía.

La tecnología nos ofrece variedad de medios informativos y esto hace posible que las campañas publicitarias que promueven la cantaleta de vaqueros, Combate y los ganadores de Vietnam interese perversos, no tengan la misma influencia que 60 años atrás. Por supuesto la prensa tradicional siguen siendo parte del viejo esquema.

Informarte requiere además de voluntad, tiempo y valor, pues afrontar una nueva realidad no es fácil.

El haber sido de derecha, de izquierda, capitalista o socialista y aceptar que son dogmas, no es fácil pues si no es blanco o negro, ¿hay algo nuevo? Por supuesto.

Los salvadoreños pienso que lo hemos encontrado, tras varias décadas de confrontación, como nación dejamos de escuchar la propaganda que nos enfrentaba y empobrecía y decidimos escuchar una opción diferente que expresaba el honestidad y desarrollo, y decidimos apostar por ella. Hasta la fecha nos va de maravilla.

En el ámbito geopolítico tendremos que decidir un rumbo no conocido, llamado mundo multipolar, este ofrece respetar decisiones soberanas, el uso de diferentes monedas en el comercio mundial, fuentes de financiamiento, no injerencia militar, política o económica. Solos no es posible cambiar el sistema, pero como América Latina, la posibilidad aumenta.

Claro, así como decidimos abandonar lo viejo conocido en El Salvador, no hay garantías de que el mundo multipolar funcione, pero parece un mundo más justo.

Por el momento gobiernos de las naciones con mayor población mundial se inclinan por el multilateralismo.

Tengo fe en este nuevo rumbo, pues lo asocio con lo que hace 5000 años anunciaron los abuelos Mayas de que se daría un cambio de era para mejorar a partir del 21 diciembre del 2012.

¡Hola! Nos gustaría seguirle informando

Regístrese para recibir lo último en noticias, a través de su correo electrónico.

Puedes cancelar tu suscripción en cualquier momento.

Ernesto Panamá
Ernesto Panamá
Columnista de ContraPunto, Escritor salvadoreño; Máster en Edición, con 13 obras publicadas

El contenido de este artículo no refleja necesariamente la postura de ContraPunto. Es la opinión exclusiva de su autor.

spot_img

También te puede interesar

spot_img

Últimas noticias