El vocero del Vaticano, Alessandro Gisotti, aseguró este martes que el papa Francisco abordará los temas de coyuntura que afectan a los jóvenes latinoamericanos actualmente durante su visita a Panamá para celebrar la Jornada Mundial de la Juventud de este año.
El sumo pontífice llegará a Panamá el miércoles, y se espera que resalte las dificultades de la juventud latinoamericana, como la migración forzada, la pobreza y la violencia.
El viaje, del 23 al 28 de enero, será el primer acercamiento de Francisco a la región centroamericana como Papa, región atrapada en una crisis migratoria mientras miles de personas intentan huir a Estados Unidos en busca de asilo o trabajo.
Cuando visitó México, en febrero de 2016, Francisco criticó el compromiso del entonces candidato presidencial Donald Trump de construir un muro a lo largo de la frontera con México para frenar la inmigración ilegal.
"Muchos de los jóvenes en esa región son inmigrantes (…) Creo que podemos esperar referencias (a la crisis migratoria) del Santo Padre", dijo a los reporteros el vocero del Vaticano, Alessandro Gisotti.
Desde mediados de octubre, miles de centroamericanos, en su mayoría de Honduras, han viajado al norte a través de México en varias caravanas, para tratar de llegar a Estados Unidos.
Muchos migrantes buscan asilo y dicen que sufren violencia y abusos contra los derechos humanos en casa. Se espera que la máxima autoridad de la Iglesia católica se pronuncie al respecto.
Francisco, de 82 años y quien cursa el sexto año de su papado, también tiene programado visitar una prisión juvenil y un hospicio para pacientes con VIH.
La Jornada Mundial de la Juventud, que se celebra en una ciudad diferente cada tres años, ha sido apodada el "Woodstock católico", un encuentro donde los jóvenes celebran su fe y discuten temas sociales.
Los organizadores esperan la llegada de más de 200,000 peregrinos al evento de este año, que se celebra en Latinoamérica por tercera vez desde que el Papa Juan Pablo II lo instituyó en 1985.
"La visita de Francisco para la JMJ (Jornada Mundial de la Juventud) demuestra el compromiso del Papa con los jóvenes de la región", dijo Miguel Montes, un peregrino que llegó desde Perú, mientras decenas de sus compañeros coreaban canciones religiosas en el atiborrado aeropuerto de Panamá.
Se esperan varios cientos de miles de personas en la misa final en un parque el domingo que estará abierto a todos los residentes y visitantes del país de 4 millones de personas, donde un 89% se identifican como católicos.
Francisco dijo en junio que había querido hacer una parada en El Salvador para rezar en la tumba del arzobispo Óscar Romero, quien se convirtió el año pasado en el primer santo de El Salvador y Centroamérica luego de ser asesinado por su prédica en favor de los desposeídos durante los años más violentos del país.