Organizaciones civiles bolivianas protestaron este jueves en contra de la candidatura del presidente Evo Morales que busca un cuarto período consecutivo al frente del Ejecutivo de su país desde 2006.
Los activistas bloquearon calles con banderas bolivianas y pancartas con la leyenda "Bolivia dijo No", en referencia al referéndum de 2016 en el que se consultó sobre la reelección de Morales.
El expresidente Carlos Mesa (2003-2005), principal eventual contendiente de Morales en las elecciones previstas para octubre de 2019 según sondeos de medios, arengó a desplegar "una batalla democrática que vamos a ganar", luego de que el Tribunal Supremo Electoral (TSE) falló a favor de habilitar la candidatura de Morales en una votación dividida.
Con el fallo, el TSE puso "en duda las bases de la democracia" y estableció "un futuro incierto para los bolivianos", advirtió el miércoles la influyente Iglesia católica en un comunicado.
En las primeras horas de este jueves, la convocatoria a protestar había cumplido su objetivo de impedir el tránsito normal de automotores, cortando las principales calles y avenidas de las ciudades.
Sin embargo, a pesar de la contundencia de la medida, especialmente en barrios de clase media y alta de La Paz, sede de los poderes Ejecutivo, Legislativo y Electoral, la participación ciudadana no fue masiva.
Miles de personas, entre empleados y estudiantes, hacían filas en la estación de teleférico de la exclusiva zona sur para transportarse hacia el centro de La Paz, pues otros medios, como el servicio municipal de autobuses, estaban en paro.