En ocasión de haber conmemorado 60 años de haber recibido el Título de Ciudad el pasado 10 de noviembre y 360 años de su refundación el pasado 16 de septiembre de este año, durante una sesión solemne realizada este día, la Asamblea Legislativa declararó simbólicamente “Capital de la República de El Salvador por un Día” al municipio de Nejapa, ubicado al norte del departamento de San Salvador.
La entrega de este reconocimiento al pintoresco poblado tuvo lugar en el parque central. Hubo discursos conmemorativos por parte de representantes de los diversos grupos parlamentarios, así como del alcalde del municipio, Adolfo Rivas.
El decreto conteniendo la declaratoria y que fue respaldado por la mayoría del Pleno Legislativo, fue avalado el pasado 24 de octubre, fecha en que los diputados mocionantes subrayaron que Nejapa ha destacado por la laboriosidad de su gente.
Este poblado fue parte de San Salvador entre los años 1824 a 1838, y al Distrito Federal de la República de Centroamérica entre 1836 y 1839.
El antiguo Nejapa estaba ubicado entre Coatepeque y Quezaltepeque y no como está hoy, entre Quezaltepeque y Apopa, en razón que el primitivo pueblo fue destruido a consecuencia de uno de los fenómenos volcánicos más notables en la historia geológica de la América Central: el aparecimiento del Cerrito del Playón, en noviembre de 1658.
Un año más tarde, los habitantes de la ciudad que hoy es capital por un día, abandonaron su primitivo asiento y se trasladaron a Quezaltepeque en enero de 1659 y posteriormente, el 16 de septiembre del mismo año, se trasladaron al sitio donde actualmente se ubica el municipio, cumpliéndose 360 años de su refundación el 16 de septiembre del presente año.
La economía de la zona se basa en el cultivo del café, granos básicos y frutas también hay crianza de ganado vacuno, porcino y aves de corral. Además, se encuentran embotelladoras de bebidas, panaderías, carpinterías, molinos de nixtamal, locales comerciales de farmacias, zapaterías, ferreterías, comedores y otros. Tiene servicios públicos de iglesias, centros educativos, planta de desechos sólidos, parque, mercado, policía, casa comunal y de cultura, agua potable, transporte colectivo, entre otros.
La Constitución de la República, en su artículo 131, manifiesta que corresponde a la Asamblea Legislativa la facultad de conceder a personas o poblaciones, títulos, distinciones honoríficas y gratificaciones.
Nejapa tiene una tradición que es reconocida no solo por nacionales, sino también por extranjeros. Se trata de las bolas de fuego.
Desde el 15 de septiembre de 1922 se celebra en la cabecera el evento conocido como «Bolas de Fuego», en la cual dos bandos conformados por decenas de jóvenes, protegidos adecuadamente, se lanzan bolas incendiarias hechas de trapos y alambres remojadas con gasolina y gas. La festividad se realiza en el marco del denominado «Día de la Juventud Nejapense» cada 31 de agosto.
Acerca del origen de esta festividad hay varias versiones. Una de ellas establece que proviene de la batalla entre San Jerónimo y el Diablo, quienes se lanzaron entre sí bolas de fuego; otra asevera que surgió para conmemorar el hecho que la lava del Volcán de San Salvador no dañó a la localidad en 1917, mientras hacía erupción, pues una imagen del Santo fue llevada por los pobladores para evitar el daño. Una última se basa en el hecho que nació para conmemorar la desaparición del poblado por la erupción del Volcán El Playón en 1658.